Durante las últimas semanas, personajes de la vida política de México con una gran influencia han sido señalados de no haber sido totalmente honestos al momento de obtener su título universitario. En esta ocasión le tocó al senador del Grupo Plural, Germán Martínez, quien aparentemente habría copiado un capítulo entero y hasta las conclusiones de su tesis.
Pese a que recientemente indicó que “repudiaré siempre el fraude académico”, el expresidente de Acción Nacional indicó que el plagio como del que fue acusada la virtual aspirante a la presidencia del PAN, Xóchitl Gálvez, era totalmente reprobable, sobre todo si entre el escándalo se ven involucradas instituciones de alto prestigio como lo es la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Con todo y su “repudio” a este tipo de prácticas ilegales, el propio Martínez no dudó en defender a Gálvez Ruiz de dichas acusaciones alegando que incluso con el supuesto plagio de 20% y la confesión directa de la misma legisladora, en realidad existe trabajo previo por lo que no puede considerarse un robo como tal. A diferencia de lo que habría ocurrido con la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yasmín Esquivel Mossa, quien es señalada por adjudicarse un texto completo aunque no hubo una resolución en su contra.
Se convirtió en lo que juró destruir
Aquel que había exigido un juicio político en contra de la ministra, ahora habría sido sorprendido incurriendo en la misma falta de la que tanto se quejó pues en su propio trabajo de tesis “Naturaleza jurídica del voto”, emitida en noviembre de 1997, y con la cual obtuvo su título como Licenciado en Derecho por la Universidad La Salle, también se observan varias anomalías.
De acuerdo con la investigación del medio “ContraRéplica”, existen unos fragmentos que también es posible encontrarlos en algunas obras publicadas años atrás y de los cuales habría olvidado poner el crédito, no solo en el pie de página sino también en la bibliografía al final del texto.
Con todo y las presuntas anomalías, su asesor de tesis, Jaime A. Vela del Río, junto con el doctor Luis Rodríguez Manzanera, director de la Facultad de Derecho en la última parte de la década de los 90, firmaron de satisfactoria la entrega ya que, aparentemente, cumplía con todos los requisitos.
Olvidó dar créditos
Dentro de su primer capítulo titulado “Derecho Electoral” se pueden encontrar varias ideas vertidas por Germán Martínez tomando como base el análisis previamente realizado por el politólogo Diete Nohlen en donde se estipulan las diferencias entre la regulación del proceso de designación de cargos públicos y la decisión para determinar quiénes son aptos para ser electos, mismo que se encuentra citado de manera correcta.
Al igual que documentos y lecturas de autores como Niklas Luhmann, Roberto Chang Mota o Rafael de Pina Vara, todos habrían recibido su crédito correspondiente como material de apoyo para la tesis.
No obstante, en el Capítulo 2 “Características Jurídicas del Voto”, solo se pueden observar cuatro citas incluso cuando hay más referencias, pero de las cuales habría copiado de manera literal o hecho modificaciones muy pequeñas que delataban el origen de las citas.
Uno de los más grandes ejemplos se puede ver en la definición de aspectos como los ciudadanos, que habría sido tomada literal del libro “Historia de la Política” de George H. Sabine, que no se observa en ninguna bibliografía y que, además, habría sido cortado y ordenado de diferentes maneras para que pareciera ser un texto propio.
Otro ejemplo bastante marcado se dio en una cita que fue copiada casi en su totalidad, a excepción de unas cuantas palabras para adecuarlo a la época en la que fue entregada la tesis. Aquí, Martínez Cázares describió quiénes son los integrantes de las Ciudades-Estado que eran considerados como ciudadanos con derechos antiguamente.