Cómo inculcar buenos hábitos financieros a los hijos

Usted es un modelo a seguir para sus hijos; si ellos ven que usted comienza formular y seguir un presupuesto y mejora sus finanzas, desde ese momento están recibiendo un mejor modelo a seguir

Dra. Claudine Moya Ponce, académica de la Facultad de Empresariales de la Universidad Panamericana (Infobae)

Según un estudio de la *OCDE 1 , los estudiantes de primaria y secundaria obtienen información sobre cómo manejar su dinero, principalmente de sus familiares u otros adultos con quienes se relacionan (94% de los estudiantes), seguido del internet (76.6 %) y sólo el 50.2% de su escuela. En lo que toca a los padres, no todos son conscientes del grado en que transmiten sus propios hábitos financieros a sus hijos. Es crucial cuidar la enseñanza financiera en casa, porque lo aprendido en casa suele contrarrestar o anular la educación financiera recibida en las escuelas; por ejemplo: saber que ahorrar es bueno, pero no hacerlo porque no se tiene el hábito.

El bienestar financiero de sus hijos depende, en mucho, de los hábitos que usted les inculque.

Aquí comparto cinco acciones sencillas para inculcar buenos hábitos financieros a los hijos. No se desanime si sabe que no tiene los mejores hábitos; qué mejor propósito puede haber que comenzar a desarrollarlos aplicando algunas de estas recomendaciones en usted mismo. ¿Qué es mejor para sus hijos: que vean que sigue endeudado(a) o cómo trata de mejorar?

1. Enseñar con el ejemplo

El cerebro infantil está programado para aprender de lo que observa y escucha de los adultos con quienes convive, quienes sirven de modelo sobre cómo administrar el dinero.

Los hijos no tienen ni la experiencia ni los conocimientos para poder distinguir entre un hábito financiero saludable y uno que no lo es, por lo que toman lo que ven como una verdad dada. Por tanto, si los padres gastan de más y se endeudan, el niño aprende a ver dicho comportamiento como “normal” y lo replicará en su vida adulta en tanto no exista algo que lo obligue a cambiar.

No es necesario esperarse a desarrollar buenos hábitos financieros en uno y, sólo entonces, comenzar a inculcarlos en otros. Recuerde que usted es un modelo a seguir para sus hijos; si ellos ven que usted comienza formular y seguir un presupuesto y mejora sus finanzas, desde ese momento están recibiendo un mejor modelo a seguir.

2. Fomentar el ahorro y establecer metas

Así sean $5 o $10 pesos, asigne una cantidad que pueda darle a sus hijos para ahorrar; si piensa que no es posible, recuerde que siempre hay gastos hormiga que puede reducir o eliminar. En vez de tomarse tres cafés a la semana, tómese dos y dele a su hijo(a) el importe del tercero. Otra opción es asignarles pequeñas tareas domésticas y darles una pequeña compensación económica. No siempre tiene que ser dinero, puede ser ahorro en especie (vales por $) que después se intercambien por aquello por lo cual ahorró.

Ayude a sus hijos a establecer metas de ahorro para adquirir cualquier otra cosa atractiva para ellos. Use alcancías para evitar usar el dinero antes de tiempo. No utilice el ahorro de sus hijos como su caja chica o para obtener cambio, a menos que les compense por ello (pagarles un interés).

3. Involucre a los niños en decisiones financieras de acuerdo a su edad

Al establecer las metas de ahorro, fomente decisiones informadas; ayúdeles a generar criterios para decidir entre alternativas de compra. Si hay tendencia a compras por impulso, pídales que reflexionen sobre qué meta o planes dejarían de cumplir por hacer dicha compra.

En cuanto al internet, enséñeles a evaluar qué sitios de compras consultar. Esté atento a los influencers que sus hijos siguen; si éstos promueven el consumismo o malos hábitos financieros, nuevamente pídanles que reflexionen sobre qué metas o planes estaría dejando de cumplir por atender lo que sugiere el influencer.

4. Fomente la inversión y el emprendimiento

Puede crear un juego donde sus hijos metan sus ahorros en un Banco imaginario (que sería usted) y donde, después de cierto tiempo, “el Banco” les dé un interés, ya sea en dinero o en especie.

También puede incentivarlos a iniciar pequeños negocios (e.g., venta de galletas, dar clases de matemáticas), donde sus hijos aprendan a separar dinero para la operación del negocio (incluyendo un sueldo para su hijo) y para el crecimiento del negocio.

Puede introducir el concepto de “impuestos”, donde cierto porcentaje de las ganancias se destine a una causa benéfica que sea valiosa para sus hijos.

5. Prepare a sus hijos para la independencia financiera

Con los hijos que trabajen o reciban una cierta cantidad para sus gastos mensuales, pueden comenzar a hacer un presupuesto para planear y gestionar sus gastos. Es importante acompañarlos en el manejo adecuado de una cuenta de cheques y tarjetas de crédito, haciendo énfasis en las implicaciones de un mal manejo de productos financieros.

Es importante inculcarles reglas sobre el uso del dinero, como la regla 50-30-20 (50% se destina a los gastos de la escuela y comida, 30% a esparcimiento y 20% para ahorro). Que comiencen a visualizar ahorrar para la tercera edad.

Deje en claro a sus hijos que, si se exceden en gastos o se endeudan, deberán hacerse cargo tomando de sus ahorros o pagando con trabajo (externo o que usted les asigne). Si usted les asigna el trabajo, establezca tarifas para ello como: cocinar equivale a $200 de la deuda. No se asuste si sus hijos se endeudan o exceden sus gastos; es parte de la curva de aprendizaje. Lo importante es que aprendan a afrontar las consecuencias de su error.

¿Por qué con trabajo y no con castigos tradicionales (como negarles permisos)? Porque es importante que comiencen a hacer conciencia de lo que cuesta ganar el dinero y porque, si llegaran a endeudarse en el futuro, tendrán que trabajar extra para conseguir el dinero con el cual pagar la deuda (sus acreedores no los van a cancelar permisos).

Lo que los padres modelan, se convierte en reglas y patrones que los hijos replican de manera inconsciente. Todo padre o madre desea que a sus hijos les vaya bien y parte de ello depende de buenos hábitos financieros. No hay que caer en el error de sentirse incapaz de inculcar buenos hábitos, sólo porque uno no los tiene. Al tiempo que comience a desarrollarlos en usted y sus hijos los aprenderán, porque le verán hacerlo.

*1 OECD (2020), PISA 2018 Results (Volume IV): Are Students Smart about Money? PISA, OECD Publishing, Paris, https://doi.org/10.1787/48ebd1ba-en.