Durante su conferencia matutina, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció la disposición del país a acatar la decisión del panel establecido por su principal socio comercial y principal proveedor de maíz.
No obstante, el mandatario subrayó que México está encaminado a formar un equipo multidisciplinario conformado por expertos mexicanos y estadounidenses para examinar a fondo si el consumo humano de maíz transgénico tiene repercusiones en la salud.
López Obrador reconoció la importancia de que Estados Unidos haya solicitado la intervención de un panel de controversias para resolver la situación, al tiempo que destacó que el asunto trasciende la esfera de México.
El mandatario enfatizó que ambos países colaborarán en la formación de este equipo conjunto con el objetivo de evaluar de manera exhaustiva los potenciales riesgos del maíz transgénico para la salud humana.
“No permitiremos que el maíz transgénico se utilice en la alimentación de nuestro pueblo, la salud es primero”, declaró el mandatario.
Luego de que México emitiera en febrero de este año un decreto presidencial que prohíbe el uso de maíz genéticamente modificado en la producción de masa y tortilla, Estados Unidos, como principal abastecedor de maíz al país, expresó su descontento y solicitó la creación de un panel de solución de controversias en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). López Obrador recalcó que la decisión de México no contraviene el acuerdo y que acatarán la resolución emitida por dicho panel.
¿Qué es el maíz transgénico?
El maíz transgénico es una variante genéticamente alterada que incorpora características específicas mediante la introducción de genes de diversas especies. Si bien los maíces transgénicos han sido concebidos con objetivos que van desde la resistencia a plagas y la tolerancia a herbicidas hasta la mejora nutricional y el incremento del rendimiento, su adopción ha suscitado debates y controversias debido a los posibles riesgos involucrados.
En relación con los riesgos para la salud, ciertos estudios han insinuado una posible relación entre el consumo de maíz transgénico y reacciones alérgicas, así como otros problemas de salud. Por ejemplo, después de que el maíz StarLink fuera genéticamente modificado para resistir a los insectos, se reportaron casos de reacciones alérgicas en consumidores. No obstante, la mayoría de las organizaciones relevantes y la investigación científica sostienen que los alimentos transgénicos son seguros y sostenibles.
¿Cuáles son los riesgos de creación?
En cuanto a los riesgos medioambientales, una preocupación clave radica en la transferencia de genes a otras especies. Cuando el polen y las semillas se diseminan en el entorno, pueden propagar características genéticas a cultivos cercanos o parientes silvestres, potencialmente originando la aparición de “supermalezas” de difícil erradicación. También surge inquietud respecto al impacto del maíz transgénico en la biodiversidad y en los ecosistemas naturales.
Aunque los maíces transgénicos aportan beneficios potenciales, también generan inquietudes en torno a posibles riesgos para la salud y el entorno. La iniciativa de establecer un panel de solución de controversias y de formar un equipo conjunto para analizar los efectos del maíz transgénico en la salud humana refleja un esfuerzo por abordar estos desafíos de manera colaborativa y alcanzar una solución equitativa.
En México, los alimentos transgénicos están regulados por la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM) y sus reglamentos. Esta legislación se orienta a prevenir, reducir y evitar los riesgos derivados del uso y liberación de organismos genéticamente modificados (OGMs).
En 2020, el presidente López Obrador emitió un decreto que prohíbe el uso de maíz genéticamente modificado en la producción de masa y tortilla. Este decreto revoca las autorizaciones existentes para el uso de maíz transgénico en la alimentación de México y establece su eliminación completa para enero de 2024. Esta decisión ha suscitado controversia y fomentado debates sobre los riesgos y beneficios del maíz transgénico.