El caso del empresario Iñigo Arenas, quien murió en un bar llamado Black Royce, ubicado en Naucalpan, Estado de México, ha dado mucho de qué hablar en los últimos días. Arenas Saiz, quien se reportó como desaparecido el pasado domingo 6 de agosto, fue encontrado sin vida el lunes 7 de agosto, en las instalaciones del mencionado bar.
Tras darse a conocer la noticia, se supo que el hombre de 41 años, antes de llegar al Black Royce, había estado en otro antro llamado República, en Polanco, al poniente de la Ciudad de México. Ahí, las cámaras de seguridad captaron cuando salió del sitio, en aparente estado de ebriedad, pues se tambaleaba de un lado a otro.
Después, había ido a comer tacos a un puesto callejero cercano a este antro, para después dirigirse al Black Royce.
Según información de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJ-CDMX), Arenas habría muerto por asfixia mecánica por sofocación inducida en su modalidad de oclusión de vías respiratorias por contenido gástrico con presencia de alcohol y sustancias químicas de naturaleza controlada, que limitaron su conciencia, funciones motoras y que en grado de probabilidad, habría propiciado su deceso.
Por la muerte de Iñigo Arenas, fueron detenidas seis personas: tres de ellas fueron mujeres que convivieron con él en el bar, dos capitanes del lugar y un guardia de seguridad.
Sin embargo, el medio Milenio señaló que un familiar de Arenas, que identificó su cuerpo, no aceptó que la causa de su muerte no haya sido una broncoaspiración por ingesta de alcohol, pues, dijo, alguien pudo haber colocado alguna sustancia prohibida en su bebida, lo que desencadenó en su deceso.
El mismo medio aseguró que la Fiscalía mexiquense estableció una hipótesis de que alguien pudo haber administrado gotas del medicamento llamado escopolamina al agua mineral que Arenas Saiz tomaba antes de su fallecimiento.
¿Qué es la escopolamina?
La escopolamina es un alcaloide natural que se encuentra como principio activo de plantas pertenecientes al género Datura o Brugmansia, nativas de América del Sur.
Esta es una sustancia afín a la atropoina, con efectos similares antimuscarínicos. En dosis bajas, se utiliza como fármaco para controlar los mareos por movimiento y las náuseas postoperatorias. Sin embargo, dosis mayores pueden causar delirio y otras psicosis, y dosis progresivamente más altas causan estupor y, finalmente, la muerte por parálisis de la musculatura lisa. Su dosis letal en humanos es de 2 a 4 mg.
En 1880, el químico alemán Albert Ladenburg la aisló y describió. Es uno de los primeros alcaloides que se consiguió aislar de los vegetales.
Además, la escopolamina es utilizada, junto con otras drogas, por criminales para reducir a sus víctimas.
Su uso medicinal
En medicina humana, la escopolamina tiene tres usos fundamentales:
- Es utilizada en muy pequeñas cantidades para prevenir y tratar el mareo, las náuseas, colitis, y los vómitos provocados por diferentes medios de locomoción.
- Por su acción sedante sobre el sistema nervioso central, se usa como antiparkinsoniano, antiespasmódico, y como analgésico local.
- También sirve para provocar dilatación de pupila en exámenes de fondo de ojo.