Sofía Castro recordó crueles ataques por ser de la familia presidencial: “La gente fue fea”

La hija de Angélica Rivera vivió en plena adolescencia la experiencia de ser hijastra de Enrique Peña Nieto, ex presidente de México

Guardar
Sofía Castro recordó que sufrió muchas críticas a su apariencia física en las redes sociales (Foto: Instagram)
Sofía Castro recordó que sufrió muchas críticas a su apariencia física en las redes sociales (Foto: Instagram)

Sofía Castro se ha convertido en una figura pública gracias a su trabajo como actriz, pero anterior a ello el público ya la conocía por ser hija de Angélica Rivera, quien durante un sexenio estuvo en el ojo público al ser la primera dama del país, cuando estuvo casada con el ex presidente Enrique Peña Nieto.

Y es que Sofía Castro vivió lo que fue ser parte de la familia presidencial en plena adolescencia, lo que significó para ella una pesada carga que la llevó al límite y por lo que incluso actualmente sigue lidiando con las secuelas emocionales derivadas de aquella vivencia.

El periodo de gobernanza de Enrique Peña Nieto abarcó de 2012 a 2018 (Foto: Instagram)
El periodo de gobernanza de Enrique Peña Nieto abarcó de 2012 a 2018 (Foto: Instagram)

Así lo compartió la actriz de 26 años en la más reciente entrevista publicada por Yordi Rosado en su popular canal de YouTube, donde recordó que en 2012, en cuanto el político priista llegó a la presidencia, los cambios en su familia fueron evidentes.

“Fue un shock de decir ‘es el presidente, mi mamá es primera dama’. Nos cambiamos de casa y mi papá, mi mamá, Enrique, hablaron con nosotros sobre que era una responsabilidad muy grande. Mi papá fue una gran pieza, un gran apoyo. Nos dijeron lo que implicaba, lo que se tenía que ser, que era una posición de mucha responsabilidad, prudencia. Y que nos cuidáramos de la gente que se nos iba a acercar”, recordó.

Angélica Rivera tiene 53 años y Sofía Castro 26
(Foto: Instagram/@sofia_96castro)
Angélica Rivera tiene 53 años y Sofía Castro 26 (Foto: Instagram/@sofia_96castro)

“De ahí en fuera, vivimos el día a día, de situaciones que se nos presentaban. Sí fuimos una familia de ocho personas, que nos queremos con el alma. Y lo más fuerte fue que cuando terminamos, dijeran que no lo fuimos. Tratamos de ser un soporte”, añadió la actriz de Tierra de esperanza.

Durante el controvertido mandato de quien fuera su padrastro, Sofía recuerda haber experimentado el acoso a su persona en las redes sociales y en la prensa, en especial guarda un doloroso recuerdo del programa estadounidense El gordo y la flaca.

“Para mí fue muy difícil por mi carrera. Yo era una figura pública y a mí me agarraron de vocera... Una situación que me pasó en Las Vegas, muy fea, con El Gordo De Molina que me correteó por todos los Grammy y me preguntaron mil cosas. Hasta la fecha no puedo ver la entrevista, El Gordo no tuvo la compasión de decir ‘es una niña’. Realmente yo no tenía los informes, los números, nosotros estábamos tomando la responsabilidad que nos tocaba”, refirió.

“Siempre hicimos lo mejor que pudimos, aguantamos vara, porque la gente fue fea, me dijeron cosas en redes sociales bien feas, que ojalá me muriera... Me costó mi autoestima, que me cerraran tantas puertas. Sí hubieron oportunidades y experiencias únicas, pero en la política es blanco o es negro, no es gris”, expresó la también hija del productor de José Alberto El Güero Castro.

Sofía Castro admitió que llegó a tener serios problemas emocionales debido al “body-shaming” que recibió en las redes sociales, donde no sólo la gestión de EPN fue puesta en tela de juicio, sino también cuestiones tribales como la apariencia física de la actriz.

“A mí me costó mucho la crítica, me deprimió muchísimo, no me gustaba salir. No me podía ver al espejo, para mí fue muy fuerte porque yo decía ‘quiero ser actriz, pero ¿quién me va contratar? Nadie me daba una oportunidad’ y todo el mundo que me dan oportunidades por quiénes son mis papás, cuando es todo lo contrario... Me volví obsesionada en ver los comentarios, se me empezó a hacer una enfermedad horrible y durante ese tiempo, se metieron mucho con mi físico y eso me afectó muchísimo”.

La joven fue cuestionada respecto a si llegó a desarrollar serios trastornos alimenticios, pero afortunadamente no lo padeció a tal grado.

“No como tal, pero sí temas alimenticios, de hacer dieta, de no comer, entre bulimia, anorexia, muchas cosas que viví a consecuencia. Sí llegué a tener temas alimenticios por la consecuencia de redes sociales, porque no tuvieron piedad, no me estoy tirando al piso, no tuvieron piedad en cómo me agredieron, cómo se ensañaron, de mi mamá, de mi familia... Puedes o no estar de acuerdo, pero por qué lastimar y agredir. A mí me destrozaron”.

“Deja muchas secuelas, muchos traumas, inseguridades, en las que tienes que trabajar todos los días. Hay veces que necesito el reconocimiento y validez de todo el mundo. Confiar en mí me ha costado mucho trabajo, recuperar mi autoestima”, reflexionó la joven actriz.

Guardar