Pese al compromiso de una cirugía que duraría sólo unos meses, este 11 de julio se cumple un año del cierre parcial de la Línea 1 del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, la más longeva del enramado que actualmente cuenta con 12 rutas que se extienden por las entrañas de la Ciudad de México.
Ante la renuncia de las autoridades a fijar una fecha para la reapertura, el Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, espera que suceda “lo antes posible”, pues inicialmente se tenía contemplado que la primera etapa de la modernización de la “Línea Rosa” tomaría de seis a ocho meses.
A más de medio siglo de operaciones, el 27 de junio de 2022 Claudia Sheinbaum informó el cierre total de 12 estaciones de la ruta, el tramo que corre de Pantitlán a Salto del Agua, como parte de trabajos para sustituir vías, renovar los sistemas de control y comunicación, modernizar los sistemas de alimentación de energía y la adquisición de 29 nuevos trenes con capacidad para transportar a más de 2 mil pasajeros en nueve carros, equipados con mejor ventilación.
Entre retrasos e incertidumbre
Aunque se tenía contemplado que la primera etapa de la rehabilitación concluyera entre febrero y marzo de este año, apenas en mayo pasado la entonces mandataria se negó a dar una fecha exacta para la reapertura debido a la calibración del sistema CBTC, para la correcta operación de los trenes.
Previamente, tras negar el retraso de las obras, el director general del Metro, Guillermo Calderón, había anticipado que el primer tramo de la Línea 1 quedaría listo en los últimos días de mayo, lo que finalmente no sucedió.
Con un par de meses de retraso, sin una fecha estimada para la reapertura y en medio de la incertidumbre de las y los miles de usuarios, la total modernización de la Línea 1 avanza a tropezones pues el cierre de la segunda sección, que va de Balderas a Observatorio, estaba programado para marzo pasado.
Debido a su longitud relativamente más corta que la del primer tramo, se tenía previsto que la intervención sucediera a lo largo de seis meses para reanudar el servicio en agosto de este año.
Reapertura, todavía sin fecha fija
A doce meses del cierre y después de un relevo en la administración capitalina, Martí Batres aseguró que la Línea 1 “no tarda mucho en que empiece a andar”; no obstante, nuevamente se negó a poner una fecha límite.
En conferencia de prensa del pasado lunes, el Jefe de Gobierno rechazó que “algo” esté demorando la apertura al público general y explicó que, para reanudar la operación en las 12 estaciones es necesaria una revisión minuciosa para garantizar la seguridad de los usuarios.
Por lo anterior, aclaró que continúan las diversas pruebas de funcionamiento y subrayó que, durante sus visitas para supervisar los trabajos, los trenes ya están corriendo sobre las vías, pero consideró prudente esperar hasta afinar los últimos detalles.
“No, no hay algo en lo particular, simplemente se están realizando las pruebas, estamos en esa etapa de pruebas y, lo más importante, como decía, en el momento en que empiece a funcionar todo este tramo, en este caso de la Línea 1, es porque ya no hay ningún pendiente que resolver”, aseveró.
El mandatario capitalino insistió en dejar a los encargados de la obras fijar la fecha tentativa para la reapertura de la Línea 1, que podría suceder pronto.
“Ya nos dirán los compañeros, no tarda mucho el momento en el que empiece a andar. Nosotros queremos, como gobierno, evidentemente que ya se abra a su funcionamiento. Siempre será una buena noticia y nos permite, además, reacomodar mejor este transporte alternativo que hemos tenido durante esta temporada; pero, de todas maneras, lo que más, más nos interesa es que cuando funcione, esté perfectamente bien todo”, acotó.