Por qué el Cártel del Golfo continúa siendo un “enemigo público” en la frontera con EEUU

Pese a la captura o asesinato de algunos de sus líderes, la organización criminal ha encontrado la forma de continuar con sus actividades delictivas a través de múltiples facciones que se mantienen en la mira de autoridades del país de las barras y la estrellas

El Cártel del Golfo figura como una peligrosa y poderosa organización que opera en México (Infobae México)

Desde hace más de un siglo, distintos estados del norte de México -y específicamente de la zona este- han padecido los estragos que ha dejado a su paso la presencia de una poderosa y peligrosa organización criminal que hasta la fecha domina el territorio: el Cártel del Golfo.

La hegemonía y estructura del grupo delictivo ha cambiado en múltiples ocasiones tras la captura o asesinato de quienes han sido sus principales líderes -como lo fue Juan Nepomuceno Guerra o los hermanos Cárdenas Guillen-, no obstante, el Cártel del Golfo se ha mantenido activo a través de múltiples facciones que continúan construyendo su historia criminal.

Aunque actualmente son precisamente escisiones como el Grupo Escorpión, Los Metros, o Los Rojos los que han acaparado la atención mediática por los enfrentamientos que constantemente protagonizan en el estado de Tamaulipas, para autoridades de Estados Unidos todas las facciones siguen siendo el Cártel del Golfo, al cual han designado como uno de sus principales enemigos públicos.

El Cártel del Golfo es considerado como un enemigo público para Estados Unidos (Foto: especial)

En una entrevista que los agentes especiales de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional en la jurisdicción de San Antonio (HSI, por sus siglas en inglés), Craig Larrabee y Mark Lippa, concedieron a InSight Crime, volvieron a confirmar que la base de operaciones del Cártel del Golfo se encuentra en Matamoros, y desde ahí coordinan sus principales actividades delictivas que son el lavado de dinero y el tráfico de drogas y armas.

Pese a ello, el agente especial Mark Lippa mencionó que autoridades estadounidenses tienen identificados esquemas extorsivos -como el tráfico de migrantes- como el origen de una parte importante de sus ingresos.

Respecto al control de territorio, los agentes especiales detallaron que los factores que influyen es que, debido a su histórica presencia en el estado de Tamaulipas, las y los integrantes de la organización criminal conocen a la perfección la logística de sus actividades, es decir, las rutas, las comunidades y las conexiones con autoridades tanto de México como del otro lado de la frontera.

De este modo, resulta difícil para cualquier otro cartel llegar y entender la dinámica de sus operaciones, tal y como ha tratado de hacerlo recientemente el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Estos son los municipios que se disputan los cárteles de la droga en el noreste de México. Foto. Infobae México

Desde finales de abril y hasta la fecha, el estado de Tamaulipas ha atravesado una ola de violencia en distintos municipios como consecuencia del enfrentamiento de algunas facciones del Cártel del Golfo en una supuesta alianza con la organización criminal que encabeza Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, y Los Zetas Vieja Escuela.

“Tamaulipas ha sido base de dos grandes grupos criminales de México: el Cártel del Golfo y los Zetas. Ambos se han fragmentado en facciones criminales hiperlocales e hiperviolentas frente a la posible incursión de otro grupo importante, el CJNG”, describe un mapa realizado tras investigaciones de InSight Crime.

Las facciones del CDG son las que tienen mayor control en Tamaulipas. Foto: InSight Crime

Las declaraciones que los agentes especiales, Mark Lippa y Craig Larabee, dieron a InSight Crime también señalaron que la plaza de Matamoros ha estado en disputa a lo largo de décadas, lo que genera picos de violencia ya que “siempre hay alguien tratando de asegurar su posición”.

No obstante, municipios como San Fernando -al sur del estado- también han sido disputados por células criminales porque las rutas hacia la frontera son importantes para los cárteles, al igual que todas aquellas zonas de operaciones a las que mueven su mercancía y a los migrantes al otro lado de la frontera.

“La metanfetamina e incluso el fentanilo se originan en el territorio de otros carteles antes de su trasiego hacia esta región fronteriza, donde el CDG toma el control y los pasa al otro lado. Así que aunque un cartel no tiene necesariamente que tener control de ambas rutas y del paso, sí necesitan controlar el punto en que los productos atraviesan la frontera”, explicó el agente Mark Lippa a InSight Crime.

De este modo, ya sea en conjunto o por facciones, el Cártel del Golfo continúa siendo uno de los principales enemigos que autoridades de Estados Unidos buscan combatir para contrarrestar sus actividades en su lado de la frontera.