A casi tres meses del fallecimiento de Rebecca Jones, este 10 de junio se llevó a cabo el homenaje póstumo que ella planeó meses antes de morir. Sus amigas y amigos cercanos se encargaron de seguir al pie de la letra las indicaciones que ella les dejó, como el no invitar a su ex esposo, Alejandro Camacho.
Rebecca murió el 21 de marzo rodeada de sus seres queridos, entre ellos Maximiliano, su hijo, y Alejandro Camacho, quien fue su esposo por 25 años.
En su momento, él protagonista de Imperio de cristal se mostró muy afectado por la muerte de la madre de su hijo y compartió que fueron días muy complicados para todos, pero estaban luchando por seguir adelante porque eso es lo que ella quería.
Pese a esta cercanía que mantenían, Ana Celia Urquidi, una de las mejores amigas de Jones, reveló a Eden Dorantes que la histrionisa no lo puso en la lista de invitados de su homenaje póstumo y, por tanto, no fue solicitada su presencia en esta ceremonia.
“La verdad es que ella hizo una lista, en esa lista no estaba Alejandro; no la critico, no la juzgo, simplemente yo creo que tiene uno el derecho a invitar a quien uno quiera invitar y eso fue lo que hicimos”
Hace unos días, Ana Celia ya había adelantado que la familia de Rebecca no asistiría al homenaje, pero mencionó que esto sería porque la mayoría vive en Estados Unidos y, además, no especificó personas.
“No va a estar (su familia) porque, por un lado, toda la familia de Rebecca vive en Estados Unidos”, dijo, sin ahondar en detalles.
Hasta el momento, Camacho no ha hecho declaraciones sobre el homenaje póstumo de su exesposa.
Rebecca Jones no quería un funeral cuando muriera
Ana Celia recordó que la protagonista de Tengo todo excepto a ti insistió en que no quería ser despedida de la forma tradicional, sino que quería un homenaje en donde todos celebraran su vida, que hubiera prensa, que vistieran de negro y que estuvieran elegantes.
“Ella siempre lo planeó así, con una gran alegría, con una gran actitud. Dijo: ‘Yo quiero esto, yo quiero esto. Quiero prensa, no quiero funeral (...) a mí no me pobreteen porque yo no soy pobrecita’”, dijo la productora el día que falleció Rebecca.
Para lograr esto, la actriz escribió una serie de instrucciones y las envió a sus amigos más cercanos. Entre algunas de las cosas que pidió fue que a su último adiós sólo asistieran ellos y su hijo, de esta forma podrían despedirse de ella de forma privada, sin el acoso de la prensa.
Los amigos hicieron cargo de buscar cumplir con todo lo que ella pidió, pero tuvieron algunas trabas para lograrlo.
Urquidi reveló que Jones les pidió hacer su homenaje en el teatro El Galeón, que fue el lugar donde se presentó la primera obra que hizo Rebecca; sin embargo, pertenece al Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) y no obtuvo el permiso para realizarlo ahí.
Explicó que, al inicio, tuvo una respuesta positiva de los directivos del INBAL, pero después la dejaron “en visto”.
“Una actriz como Rebecca Jones que estaba pidiendo hacer su última función en un teatro, que fue el primer teatro donde ella trabajó como actriz, me pareció una grosería. Me parece horrible porque es el INBA, porque no puedo creer que Bellas Artes, que el director de los teatros me haya dejado en visto”, explicó a De Primera Mano.