Las modificaciones a la Ley de Educación de la Ciudad de México (CDMX) permitieron que el Instituto de Estudios Superiores “Rosario Castellanos” se convirtiera en una Universidad Pública, con patrimonio y personalidad jurídica propios, pues el objetivo de la decisión es ofrecer al personal académico un sistema de gestión educativa similar a la de cualquier otro institución de nivel superior.
En la gaceta del Congreso de la CDMX también se menciona que la Universidad de la Salud (UNISA) tendrá un proceso similar para obtener reconocimiento legal como institución de educación universitaria. Uno de los objetivos es garantizar a los jóvenes estudiantes un espacio para continuar con su formación profesional desde entornos autónomos en los que incluso se omite el uso de uniformes con la finalidad de respetar las libertades de los alumnos.
Con la adición de estas dos nuevas universidades, la CDMX contará con 341 escuelas en las que los alumnos capitalinos acceden a una educación superior pública, según las cifras disponibles en el sitio web del Sistema de Información Cultural. Este último punto fue el que se consideró en la iniciativa respecto a la incorporación de las instituciones al sistema educativo de carácter gratuito.
El Instituto Rosario Castellanos y la Universidad de la Salud serán autónomos
Tanto el Instituto Rosario Castellanos como la Universidad de la Salud son organismos públicos descentralizados con poder jurídico propio, de acuerdo a los cambios a la Ley de Educación de la CDMX. En el caso de la UNISA, el decreto establece que estará “sectorizado” a la la Secretaría de Educación Ciencia, Tecnología e Innovación (Sectei). Lo anterior se decidió para que comiencen procesos de contrataciones académicas y la institución fortalezca su autonomía técnica.
Las reformas importantes a esta ley se presentaron en el artículo 24, pues a través de esta legislación ambas escuelas serán llamadas universidades por el alumnado y la jurisdicción vigente. Además, el artículo 49 estipula que el Sistema de Educación Comunitaria tendrá un papel jurídico de un órgano adscrito a la Sectei, cuyo titular será elegido por el Jefe de Gobierno de la CDMX.
Otra de las especificaciones marcadas por disposición oficial en el artículo 29 es la anexión de ambas universidades al plan de recursos financieros. La inversión a las escuelas se realizará con una perspectiva de largo plazo, es decir, será obligatorio que en el Presupuesto de Egresos de la capital se establezcan los recursos suficientes para el desarrollo de las funciones de cada universidad en la capital.
La CDMX estrena la Universidad Rosario Castellanos en 2023
El decreto por el cual se anexan estos planteles a la educación superior pública también menciona que entrará en vigor un día de después de su publicación en la gaceta de la CDMX. Lo anterior significa que durante junio, los estudiantes comenzarán un nuevo ciclo escolar de forma gratuita en las universidades recién incorporadas por la decisión avalada en el Congreso.
La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, celebró en sus redes sociales que el Congreso local haya aprobado la reforma: “Antes la Rosario Castellanos era la cuarta opción, querían entrar a una y no pasaban los exámenes y al final iban a la Rosario Castellanos, pero hoy el 60% de los estudiantes de primer ingreso escogieron esta escuela como su primera opción”, reconoció la importancia de la institución.
En la actualidad, hay 37 mil estudiantes que cursan su educación superior en las 22 carreras de la Universidad Rosario Castellanos, como será llamada desde junio. Con la gestión autónoma de las reformas, se espera que aumenten su capacidad de gestión para satisfacer la demanda de los estudiantes y la matricula de inscripciones, como mencionó Sheinbaum a través de su cuenta oficial de Twitter.