Estos son los dos refrescos mexicanos con más azúcar, según la Profeco

Después de los análisis a distintas bebidas, solo un par de ellas se distinguieron por sus altos niveles de endulzantes

Después de los análisis a distintas bebidas, sólo un par se distinguió por sus altos niveles de endulzantes (Imagen de KamranAydinov en Freepik).

Entre los refrescos hay marcas que usan más azúcar que agua carbonatada. La presencia de carbohidratos en estas bebidas está anunciada en el etiquetado, que desde 2020 obliga a las industrias a exhibir la información sobre el exceso de calorías y el aclarar de forma específica qué componentes abundan en cada producto. Con esta ley, los consumidores conocieron más acerca de sus alimentos preferidos y cómo se conformaban sus hábitos alimenticios.

Ante la controversia del Nuevo Etiquetado Frontal, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) continúo con la investigación sobre los niveles de azúcar en los refrescos, pues México es uno de los países en los que más se consumen este tipo de bebidas. Así, gran parte de la población accede a una fuente de azúcar desmesurada en envases de uno o dos litros que comparten con los amigos y familiares.

Las consecuencias de tomar refresco en exceso repercuten en el estado de salud. El problema más común es el aumento del 60% de padecer obesidad, 6% de sufrir un infarto y 26% de desarrollar diabetes, según lo explica la Secretaría de Salud (SSA). Además, el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) explica que el 7% de los fallecimientos anuales en adultos se atribuyen a bebidas azucaradas.

Red Cola y Dr. Pepper, los refrescos más azucarados

Luego de tres años con el Nuevo Etiquetado Frontal, Profeco realizó una serie de estudios sobre los refrescos más famosos del país. En total, fueron seleccionados 46 presentaciones cuyo contenido fue menor a un litro, algunos eran adicionados con azúcares, cafeína, endulcolorantes, bajos en calorías y versiones dietéticas que se han popularizado en el mercado nacional.

Dr. Pepper es el refresco con más azúcar en 600 mililitros. (Dr, Pepper/Europa Press):

Dr. Pepper lideró la lista de los refrescos más azucarados con 70.2 gramos (g) de este carbohidrato en 600 mililitros. Red Cola siguió con esta tendencia al presentar 57.0 gramos en la misma cantidad de líquido. La cantidad recomendada de ingesta de azúcares una medida menor a la que tienen estos productos: 25 g, según explicó la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Aunque estos dos nombres aparecen como los principales en la escala de la Profeco, hay más marcas: siguen la naranjada de Jumex (52.2 g), Orange Crush (51.6 g), Sangría (46.5 g) y Mirinda (31.8). La bebida de 330 mililitros con menos azúcar (16.2 g) es Kas, según los registros de la Revista del Consumidor. Este último se mantienen por debajo el margen que estableció la OMS.

Los refrescos incumplen las normas del Nuevo Etiquetado Frontal

Luego de los resultado obtenidos, Profeco determinó que la mayoría de estos refrescos incumplían con el Nuevo Etiquetado Frontal, algunas de las marcas famosas son Jumex, Sangría y Barrilitos. También se omite mencionar los métodos de prueba y disposiciones sanitarias al igual que especificaciones de preparación. Lo anterior se contrapone a la Norma 2018, cuya propósito es exigir a las industrias a aclarar estos datos de forma clara.

El INSP estima que cada persona toma 163 litros al año en México. (Archivo/Infobae).

Profeco también explicó que las bebidas contienen agua natural, sacarosa (azúcares), jarabe de alta fructuosa y jugo de frutas. Uno de los principales obstáculos para identificar los componentes está ligado al desconocimiento de la población mexicana sobre términos específicos para cada elemento en un refresco.

Pese a las repercusiones negativas de consumir refrescos, México se encuentra entre los países con mayor ingesta de bebidas azucaradas, con un estimado de 163 litros al año por persona, aunque las estimaciones podrían variar según la alimentación de cada caso. Además, las bebidas alta en sodio se posicionan entre las más peligrosas para la salud porque al tomarlas en exceso aumenta el riesgo de desarrollar hipertensión y un desgaste del sistema inmune con el transcurrir de los años, como lo explica el INSP.