La irrupción de los cárteles mexicanos en la frontera de Australia para importar cocaína

En México hay dos cárteles de la droga que no solamente han logrado tener una fuerte presencia a lo largo del país, sino que sus operaciones las han expandido a otros continentes. Se trata del Cártel de Sinaloa y del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), consideradas como organizaciones criminales de carácter transnacional.

Dentro del mundo del narcotráfico, Australia se ha convertido en un país en el que la oferta y el consumo de la cocaína han crecido exponencialmente en los últimos años. Lo anterior estaría relacionado con las nuevas rutas usadas para el trasiego de drogas y los presuntos vínculos entre los cárteles y las personas que trabajan en el régimen de seguridad fronteriza, como en los puertos aéreos y marítimos.

Un exempleado del aeropuerto de Sydney comentó a Four Corners (un equipo de investigación australiano que publica reportajes en la cadena ABC News) que las organizaciones criminales tienen la facilidad de importar toneladas de cocaína a dicho país gracias a lo agentes fronterizos.

El entrevistado de nombre reservado indicó que hay personal de inmigración y de aduanas que están en la nómina de los cárteles. “No es sólo una persona la que tienen, tienen un sindicato probablemente en cada estado. En cada aeropuerto, en cada puerto”, aseguró.

Si bien los periodistas Mahmood Fazal, Amos Roberts y Dylan Welch no pudieron comprobar la relación entre los trabajadores del régimen de seguridad fronteriza de Australia y los traficantes de droga, la Fuerza Fronteriza Australiana (ABF, por sus siglas en inglés) puso en marcha a finales de 2021 la Operación Jardena, con la finalidad de identificar al personal que tiene vínculos con el crimen organizado.

Aunque el extrabajador no mencionó explícitamente para qué grupos criminales de México trabajó, el medio australiano indicó que se trataría del Cártel de Sinaloa y del CJNG. Sin embargo, su conexión con ellos se dio a través de un intermediario que ahora se encuentra prófugo de la justicia.

Detalló que dichas organizaciones criminales no solamente cuentan con el apoyo de agentes fronterizos australianos que vigilan la importación de cocaína, sino que también tienen a su propio grupo de sicarios y personal administrativo que supervisa sus negocios.

Indicó que él se desempeñaba como una “puerta”, término empleado para referirse a una persona o grupo de personas que facilitan el tráfico de drogas que entra por la frontera de Australia. De esa manera, el entrevistado mencionó que él se encargaba de organizar la cocaína que entraba y salía del aeropuerto de Sydney.

Para ello, contaba con unas tarjetas magnéticas que le permitían el acceso a zonas restringidas. Según sus declaraciones, cada dos o tres días importaba hasta 15 kilogramos de cocaína, cuya comisión era del 30% del producto.

La manera en que los cárteles mexicanos corrompen a los trabajadores australianos de seguridad fronteriza se da a través de dos formas: intimidación y sobornos. “Alguien les emborrachaba, les daba cocaína y les explicaba la cantidad de dinero que podían ganar”, explicó.

Si lo anterior no funcionaba, los traficantes les indicaban en un tono amenazante que sabían dónde vivía su familia, quiénes eran y cuáles eran sus trabajos, adivirtiéndoles que existián ciertos riesgos si no aceptaban “cooperar” con ellos.

Finalmente, el entrevistado comentó que dejó de trabajar en el aeropuerto de Sydney, pues sabía que en cualquier momento se podían “deshacer” de él. Sin embargo, aún sigue implicado en el tráfico de drogas, pues ahora es miembro de un club de moteros “fuera de la ley”.

El número de detecciones de cocaína en la frontera australiana aumentó un 447% en la última década, pues pasó de 482 kilogramos en 2010 a 2,660 en 2020, según cifras incluidas en el Informe de Datos sobre Drogas Ilícitas 2019-20, de la Comisión Australiana de Inteligencia Criminal (ACIC, por sus siglas en inglés).

De 2019 a 2020, los cargamentos de cocaína interceptados en la frontera se produjeron en los flujos de carga aéra, marítima y correo internacional. Durante ese periodo se identificaron a 24 países involucrados en el tráfico de drogas que eran enviadas a Australia. “Por peso, México fue el principal punto de embarque de cocaína detectado”, se detalló, aunque también se incluyó a Estados Unidos, Alemania, Austria, Brasil, Bélgica, Países Bajos, Canadá y Francia.

Lo anterior se ve reflejado en los niveles de consumo, pues en 2020 se contabilizaron poco más de 5 toneladas de cocaína consumidas en Australia, según el doceavo reporte del Programa Nacional de Vigilancia de Drogas, elaborado por la ACIC y la Universidad de Queensland.

El decomiso más reciente de esta sustancia se realizó a principios de marzo de este 2023. De acuerdo con informes de la Policía de Australia, se logró incautar un cargamento de 2,4 toneladas de cocaína que estaba vinculado con un cártel mexicano, cuyo valor aproximado era de USD 676 mil 800 millones.

Durante esas acciones se detuvieron a 12 personas, como parte de una operación encubierta que comenzó en noviembre de 2022, en la que participó el Escuadrón Transnacional contra el Crimen Organizado y Serio (TSOC).

Asimismo, en agosto del año pasado un hombre de Nueva Gales del Sur, de 50 años de edad, fue condenado a nueve años de prisión por importar 188 kilogramos de cocaína que fueron suministrados por un cártel mexicano en 2019. La droga fue oculta en cientos de lingotes de alumnio para que no fuera interceptada por las autoridades, pero finalmente fue decomisada. Esto ha dejado en evidencia la presencia de las organizaciones criminales de México en territorio australiano.