El pasado martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) recibió al empresario Germán Larrea Mota Velasco en Palacio Nacional. Por medio de redes sociales comenzó a circular un video ese día, en el que se ve al empresario, quien es dueño de Grupo México, y quien es considerado la segunda persona más rica del país, solo por detrás de Carlos Slim, saliendo de Palacio Nacional sin dar ninguna declaración.
La reunión se dio a conocer luego de que el presidente del país diera a conocer, durante su conferencia mañanera de ese mismo martes, que Grupo México era uno de los posibles compradores del banco Banamex, que aún pertenece a la empresa de servicios financieros Citigroup, además de dar su visto bueno para que se lleve a cabo la operación.
“Tenemos información que van muy bien las negociaciones y que uno de los posibles compradores es el Grupo México, y nosotros les hemos transmitido a los consejeros, directivos, de Citibanamex que no hay de parte del Gobierno de México ninguna inconformidad, que no hay de parte nuestra ningún problema en que se lleve a cabo esa operación”, comentó el presidente López Obrador el pasado 16 de mayo.
Desde Palacio Nacional, el presidente de México informó que ya se definieron, con anticipación, cuáles son las reglas para que se lleve a cabo la compra. Dijo que, la primera regla es que fuese capital mexicano el encargado de adquirir la institución bancaria. La segunda condicionante es que estén al corriente en el pago de impuestos y el tercero es que se pague el impuesto por la operación.
AMLO señaló que “sólo me falta revisar la parte del pago de impuestos, es lo único, pero vemos bien que se lleve a cabo la operación y, si van a ser los del Grupo México, no va a haber ningún problema.
“Tenemos diferencias con ellos, pero eso es otro asunto, ese es otro cantar; en el caso de la venta o compra del banco no hay problema”, señaló.
A pesar de estas declaraciones, que señalaban que la relación entre AMLO y Larrea iban por buen camino, el pasado viernes 19 de mayo se dio a conocer que elementos de la Marina (Semar) tomaron parte de la unidad ferroviaria de Grupo México en el istmo de Tehuantepec, lo que resultó ser un movimiento no previsto que podría complicar la oferta de la empresa minera para comprar Banamex, además de que, algunos especialistas han calificado la acción como negativa para la inversión en México.
Un tramo del ferrocarril de Ferrosur S.A. en Coatzacoalcos, Veracruz, fue considerado “de utilidad pública” y transferido a una entidad gubernamental llamada Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, que será operado por la armada, según lo informado en el Diario Oficial de la Federación.
Esto posiblemente provoque que que la relación entre la segunda persona más rica de México, quien según Forbes cuenta con una fortuna de USD 26 mil 600 millones, y AMLO, la persona más poderosa de México, políticamente hablando, sufra alguna fractura.
Sin embargo, esta no sería la primera vez en la que el magnate y el jefe del Ejecutivo federal tengan conflictos, pues tienen un largo historial de ellos.
¿Por qué han tenido conflictos AMLO y Larrea?
Quizá uno de los primeros conflictos que tuvieron AMLO y Larrea, fue en 2006. Y es que en ese año, hubo una explosión en la mina Pasta de Conchos, propiedad de Grupo México. En ese accidente, 65 mineros quedaron atrapados. AMLO, quien en ese momento era candidato presidencial, criticó fuertemente el actuar de los empresarios y exigió indemnización para los familiares de las víctimas.
En las elecciones del 2018, en las que López Obrador llegó al poder, el magnate Germán Larrea llamó a sus empleados a razonar su voto y “alejarse de las políticas populistas”.
Fue por medio de una carta que dirigió a sus trabajadores, que Larrea pidió a sus 50 mil trabajadores pensar su voto y analizar las propuestas de los candidatos a la presidencia de México, que además de AMLO, eran Ricardo Anaya por el PAN, José Antonio Meade, por el PRI y Jaime Rodríguez Calderón, por la vía independiente.
Dijo que existía preocupación por temas de estatización de empresas y derogación de reformas, así como las acusaciones de corrupción por parte de López Obrador contra Grupo México.
En la carta membretada, con firma y el nombre y cargo de Larrea, se leía que “salgamos libremente a votar con inteligencia y no con el enojo que hoy todos compartimos. Nuestro país requiere de un voto razonado, inteligente y a conciencia, del México que queremos para nuestras familias y nuestros hijos”.
Además, se pide que “analicemos las propuestas de los candidatos y entendamos los beneficios y consecuencias de cada una para poder emitir un voto libre, responsable, informado y útil, que sea para tener un mejor México”.
También, en la misiva, se leía que “estamos preocupados por el bienestar de nuestros empleados, de nuestra empresa y de nuestros colaboradores y tomaremos todas las medidas necesarias para asegurar la continuidad del negocio dado que de ello depende el bienestar y patrimonio de nuestros 50 mil trabajadores y sus familias, y miles de proveedores y accionistas que colaboramos en Grupo México”.
Negó cualquier acto de corrupción como práctica de la empresa y dijo que el término concesión no es sinónimo de corrupción ni de compadrazgo como se había estado insinuando en ese momento. “Recientemente hemos escuchado con preocupación, propuestas de estatización de empresas, la derogación de las reformas energética y educativa, entre otras ideas que significarían un retroceso de décadas y el regreso a un modelo económico que está más que probado que no ha funcioando en varios países: Venezuela, Argentina, Cuba, la extinta Unión Soviética, entre otros, son testigos de ello”, se lee en el documento.
Otro de los momentos de tensión que ha tenido la relación entre AMLO y Larrea fue cuando, en noviembre pasado Grupo México informó que dejaría su participación en la construcción del tramo cinco del Tren Maya, pues le era imposible cumplir con los plazos establecidos para la entrega del proyecto, que se estimaba, sería en julio próximo.
Al respecto, el presidente López Obrador dijo que se trató de un incumplimiento del contrato por parte de Larrea.
Este 2023, el gobierno de AMLO realizó una serie de modificaciones a la Ley Minera que significaron un golpe a los negocios de Grupo México.