Aunque Arturo “El Negro” Durazo Moreno no era una deidad, durante el tiempo que fue funcionario público en México acumuló tanto poder político y económico que logró construirse su propio templo de más de 20 mil metros cuadrados en una de las zonas más turísticas del estado de Guerrero: Ixtapa Zihuatanejo.
Conocido por sus excesos y escándalos de corrupción, el ex jefe de la Dirección General de Policía y Tránsito de la capital del país optó por mandar a edificar una imponente y lujosa mansión que fue el escenario perfecto para las fiestas de las clases sociales más altas de la época.
En el año 2000 Durazo Moreno falleció, no obstante y tras 23 años, las ruinas de lo que un día fue una de las mansiones más lujosas del estado de Guerrero prevalecen en total abandono aunque continúa siendo un sitio de total interés para curiosos que les atrae la historia de uno de los funcionarios públicos más polémicos que tuvo el entonces llamado Distrito Federal.
De este modo, en días recientes el usuario de TikTok identificado como Pedro Franco (pedrofranco03) publicó una serie de videos en la red social en donde se le aprecia adentrarse en el terreno en donde se encuentra totalmente abandonado el también llamado “Partenón Durazo”.
Desde la peligrosa pendiente de terracería que dirige al inmenso inmueble y hasta las habitaciones principales en donde todavía se encuentran los espacios de los jacuzzis que albergaba, el tiktoker y su joven hija recorrieron cada rincón de la inmensa mansión que ahora solo habitan animales como murciélagos y roedores.
En los primeros videos se aprecia como entre la maleza seca de la zona se erigen los muros que marcan el perímetro de los más de 20 mil metros cuadrados, mientras que un portón de altísimos barrotes de acero marcan la entrada a la propiedad.
Del lado derecho, el tiktoker asegura que se ven jaulas en donde algún día El Negro Durazo tuvo leones, mientras que esculturas que evocan a la Antigua Grecia decoran el descuidado jardín.
Las columnas que sostienen la inmensa propiedad también cuentan con un estilo arquitectónico de la Antigua Grecia, lo que lleva a la propiedad a recibir el apodo de “Partenón Durazo”. No obstante, el inminente paso del tiempo las ha desgastado al punto de haber adquirido un color grisáceo.
Del mismo modo, los pisos, escaleras y pinturas que adornaban los pasillos y estancias de la mansión se perciben en un deterioro al estar cubiertos de tierra, hojas secas e incluso heces de los animales que han estado de paso por ahí. En repetidas ocasiones al tiktoker se le escucha mencionar su temor por los murciélagos.
Una de las áreas que destaca del recorrido es la alberca, la cual mide tres metros y solía estar rodeada por una docena de estatuas que adornaban los jardines; en sus buenos tiempos se dice que había a las orillas faisanes y cisnes, lagartos disecados, venados de bronce y un elefante de marfil, así como un par de perros de cerámica. Sin embargo, en la actualidad se observa descuidada y sucia al igual que el resto de la casa.
La mansión en Zihuatanejo fue construida tomando como referencia el Partenón y el arte griego, contaba con una discoteca similar al estilo del Studio 54 ubicada en Nueva York, en una superficie de más de 19 mil metros cuadrados, no obstante, a esa zona no tuvo acceso el tiktoker identificado como Pedro Franco.
En 2019, Francisco Arturo Durazo Garza, hijo del ex jefe policiaco, presentó ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) un recurso de reclamación a nombre de los herederos de su padre y de su madre, Silvia Garza Sáenz, para que se revirtiera el fallo de un tribunal colegiado que avaló en 1989 la expropiación del Partenón.
Y es que, en ese mismo año, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) cedió los derechos de la mansión al gobierno de Guerrero para que, con un poco de mantenimiento, se convirtiera en una casa de cultura. No obstante, hasta la fecha en la que se escribe esta nota el inmueble permanece en total abandono.