Alejandro Fernández cumplió 52 años de edad, el Potrillo está de fiesta pues está celebrando un año más de vida en compañía de sus seres queridos. Pese a las recientes polémicas que ha generado por su apariencia física, el cantante de música ranchera emprenderá una gira por España para los meses junio y julio, además de que continuará sus presentaciones en diversos palenques en México.
La imagen del Potrillo ya forma parte de la cultura musical del regional mexicano, pues desde los cinco años el hijo de Vicente Fernández ha estado vinculado a este género musical. Una de sus primeras apariciones como intérprete de música ranchera fue cuando el fallecido cantante lo llevó a una presentación para que cantaran juntos.
Así que desde la infancia, Alejandro Fernández ha vestido el traje de charro imitando el estilo del Charro de Huentitán. A partir de entonces, la imagen del cantante de Como quien pierde una estrella quedó vinculada al mariachi. Aunque a lo largo de su carrera musical ha experimentado otro tipo de géneros —como el pop—, también se ha animado a probar otro tipo de estilos.
¿Cómo ha cambiado Alejandro Fernández con los años?
El público mexicano vio crecer al Potrillo ya que desde 1976, su primer concierto con su padre, Alejandro Fernández estuvo vinculado a la farándula mexicana. Con su debut en las película Picardía mexicana —junto a Don Chente—, sus fans vieron como fue cambiando la imagen de un niño tímido que desde pequeño se le enseñó a actuar y cantar.
A pesar de que desde infante tuvo diversas apariciones en escenarios, fue hasta cuando cumplió la mayoría de edad que empezó una carrera musical propia y se fue desprendiendo de la imagen de su papá. Con 18 años de edad estrenó el disco México, voz y sentimiento y galletas junto a Don Chente, a la par colaboraron en la grabación de la película Mi querido viejo.
Aquella primera imagen del Potrillo se le vio al cantante con un aspecto joven, se caracterizó por tener el cabello corto con unas pronunciadas cejas de color oscuro al igual que su cabello, en contraste de Don Chente quien ya reflejaba algunas canas.
Así se estrenó Alejandro Fernández en los escenarios. Pero no fue hasta marzo de 1992 cuando lanzó su carrera musical con su primer álbum llamado Alejandro Fernández, después vino su segundo álbum con el nombre de Piel de Niña. Cabe apuntar que sus primeros discos conservó el estilo mariachi.
Poco después de casarse con América Guinart y convertirse en padre se atrevió a realizar cambios en su look, principalmente con su cabello pues lo dejó crecer al grado que se hacía una coleta. Tal cambio generó una serie de polémicas en su entorno, principalmente por la educación tradicional que recibió de su padre.
Sin embargo, pese a críticas siguió innovando en su estilo así como en los diferentes géneros musicales que emprendió para sacar nuevos éxitos. Llegó a colaborar con Chayanne, Marc Anthony e incluso con Beyoncé manteniendo a la música mariachi dentro de su repertorio.
Cuando Alejandro Fernández llegó a una edad madura y empezaron a salirle algunas canas, en lugar de ocultarlas las dejó y cortó su cabello para presumirlas. Incluso cuando ya no tenía nada de color su cabello, se tomó diferentes selfis para lucir que tanto su barba como cabello empezó a tornarse blanco por la edad.
A pesar de los pasos de los años mantuvo su apariencia física muscular, solo las arrugas delataban su edad. Cuando cumplió 50 años nuevamente dejó entrever sus canas y el cabello largo, y es que de las últimas veces que se le vio con el cabello corto fue cuando falleció Vicente Fernández.
Desde la muerte de su padre, ha preocupado a sus fans pues se le ha visto en aparente estado de ebriedad durante sus conciertos, demacrado y bajo de peso.