Droga con el rostro de Caro Quintero fue decomisada en Argentina

El cargamento de cocaína fue encontrado por las autoridades en la provincia de Santiago del Estero

Los paquetes tenían impresa la cara del capo mexicano. (Especial/Policía de la Provincia de Santiago del Estero)

Aunque Rafael Caro Quintero fue recapturado en julio de 2022, su legado criminal se ha mantenido presente en la zona norte de México e incluso, según reportes oficiales, ha llegado a Argentina.

El sábado 15 de abril, agentes de la Policía de la Provincia de Santiago del Estero efectuaron un operativo que derivó en la detención de siete individuos, todos originarios de Salta, y el aseguramiento de un cargamento de cocaína que estaba etiquetada con el rostro de Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara en los ochenta, miembro del Cártel de Sinaloa y posterior jefe del Cártel de Caborca, grupo que ha mantenido el control de varias rutas de droga en Sonora por décadas.

Según el reporte policial, elementos de la Subcomisaría Comunitaria de San José del Boquerón implementaron un operativo de control vehicular en la Ruta Provincial Número 4, durante el cual detuvieron un vehículo en el que viajaban un hombre y una mujer. Al cuestionarles su presencia en el lugar, ambas personas incurrieron en contradicciones.

Minutos más tarde, al mismo sitio llegó un sujeto a bordo de una motocicleta, quien se identificó como el hijo de la mujer retenida en primera instancia. No obstante, al dialogar con las autoridades, ofreció una versión totalmente distinta a la que los agentes habían recabado anteriormente.

Las autoridades no informaron si la y los detenidos tendrían nexos directos con el narcotraficante mexicano. ( Policía de la Provincia de Santiago del Estero)

Como parte del mismo despliegue de seguridad, los uniformados interceptaron una camioneta Volkswagen Amarok que circulaba por la zona con dos personas a bordo, las cuales fueron escoltadas hasta el puesto de control de la Subcomisaría, a donde también llegaron miembros de la Gendarmería Nacional.

De este vehículo fueron decomisados 23 envoltorios (o “ladrillos”, como también se les conoce en el mundo del trasiego de narcóticos) de polvo blanco. Al someter la sustancia a pruebas de campo, las autoridades confirmaron que se trataba de cocaína. En total, los sujetos viajaban con 24 kilos 360 gramos de esta droga.

Uno de los detalles más relevantes del hallazgo fue que todos los paquetes, además de estar cubiertos con cinta y papel amarillo, tenían impresa una fotografía del capo que durante su trayectoria criminal ostentó apodos como “El Príncipe”, “Don Rafa” o “El narco de narcos”.

La imagen es una de las más conocidas de Caro Quintero, pues fue capturada durante la juventud del narcotraficante, en los ochentas, cuando se encontraba preso en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) Número 1, conocido como el Penal del Altiplano, en Almoloya de Juárez, Estado de México.

La imagen de Caro Quintero fue tomada durante su estadía en el Penal del Altiplano. (Archivo)

Hasta el momento, no hay informes oficiales que esclarezcan el motivo por el cual los “ladrillos” de cocaína encontrados en Santiago del Estero estaban membretados con el retrato del exjefe criminal sinaloense.

Conviene subrayar que, en el contexto de los grupos criminales dedicados al narcotráfico, la práctica de “etiquetar” los cargamentos es muy común, ya que es una manera de identificar el origen de la sustancia.

Uno de los ejemplos más destacados de esta práctica a nivel internacional ha sido autoría del Cártel de Sinaloa. En fechas recientes, la Policía Nacional de España desmanteló lo que sería el laboratorio de procesamiento de cocaína más grande de toda Europa, en el que hallaron paquetes marcados con la “S” de Superman, distintivo utilizado desde la década de 1990 por el grupo otrora comandado por Joaquín “El Chapo” Guzmán.

La policía española incautó 1.300 kilos de pasta base de cocaína, aparentemente del Cártel de Sinaloa. (Policía Nacional)

No obstante, en tiempos recientes no se habían reportado indicios de la presencia de cárteles mexicanos en Argentina, en especial de grupos aliados a Caro Quintero o el Cártel de Caborca.

En julio de 2008, la policía del país sudamericano descubrió un laboratorio de procesamiento de metanfetamina y producción de éxtasis en la localidad de Ingeniero Maschwitz, Buenos Aires. Durante la redada fueron detenidas nueve personas que, luego de las investigaciones, se confirmó que eran originarios de León, Guanajuato y aparentemente pertenecían al Cártel de Sinaloa.

Durante el desarrollo de las indagatorias, el juez federal Federico Faggionatto Márquez aseguró que la célula del grupo sinaloense que operaba en Argentina estaba liderada por Jesús Martínez Espinoza, capturado en Paraguay en octubre de 2008 e identificado como uno de los principales traficantes de efedrina.