El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) volvió a utilizar su mañanera para lanzarse contra periodistas e intelectuales que han criticado las decisiones de su gobierno.
Luego que el historiador Enrique Krauze publicó en The Washington Post un artículo sobre los riesgos que implican para la integridad física de los periodistas y críticos los constantes ataques de López Obrador desde Palacio Nacional, el tabasqueño defendió su derecho de réplica al argumentar que es el presidente más agraviado en más de un siglo.
“No les gusta que les diga, porque es cierto, que desde la época de Francisco I. Madero nunca se había atacado tanto a un presidente y todavía se atreven a decir que este es un gobierno autoritario”, reprochó el tabasqueño este 13 de abril.
Desde Palacio Nacional, el Jefe del Ejecutivo desglosó una lista de “eminencias” esmeradas, según él, en insultar a su persona y movidas por su inconformidad con la Cuarta Transformación (4T) de AMLO.
Los periodistas Denise Dresser y Aguilar Camín, el investigador Guillermo Sheridan, así como los ex consejeros electorales Lorenzo Córdova y Ciro Murayama fueron los blancos en esta mañanera y a los que López Obrador exhortó a “serenarse” tras tacharlos de estar “confundidos y ofuscados”.
“Hablamos de pura eminencia que me insulta. Están confundidos. Ojalá y se vayan serenando y vayan encendiendo de que ya son otros tiempos”.
Además, el presidente de la República se quejó nuevamente que todos los medios de comunicación cuestionan a su gobierno y los acusó de estar en el lado del bloque conservador.
Frente a los cuestionamientos a su estilo de gobernar, López Obrtador aseguró que en el pasado existía una red de complicidades entre gobiernos, intelectuales y organizaciones civiles.
El presidente de la República reconoció que en la actualiadad algunas personas le han pedido que dejé de culpar al pasado y en su lugar se concentre en atender problemas como el de la inseguridad, no obstante, resaltó que su interés es que lo más jóvenes conozcan el pasado político del país y en ese sentido, volvió a quejarse del intento de desafuero en 2005, cuando como Jefe de Gobierno del Distrito Federal desacató una orden judicial.
En el caso de la politóloga, Denise Dresser, el mandatario federal expuso que ella es parte de la élite del país, pues es maestra de tiempo completo en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), por lo que es un agravio que haya propuesto la cancelación de las conferencias mañaneras en Palacio Nacional.
Dresser pidió suspender las mañaneras de AMLO
En las últimas semanas el Jefe del Ejecutivo ha intensificado sus críticas contra la también columnista Denise Dresser Guerra luego de que sugirió poner fin a las conferencias de prensa matutinas.
“Los conservadores son intolerantes. Nada más quieren hablar ellos, no quieren que hablemos todos. Pero bueno, no van a poder”, contestó con tono irónico López Obrador a través de un video en su cuenta de Twitter.
La respuesta del tabasqueño obedeció a los dichos de la columnista, quien señaló que estas conferencias son usadas por el presidente de la República para atacar a la prensa y críticos, creando “enemigos a conveniencia”.
En ese mismo sentido, el historiador Enrique Krauze expuso ante la prensa internacional que López Obrador disfraza de “conferencias” sus ataques a todos aquél que no concuerda con su gobierno, y lamentó que la agresividad del discurso de López Obrador pueda ser malinterpretado por un seguidor de la 4T para atentar contra la integridad de quienes son señalados como adversarios de AMLO.
Cabe recordar que hace unas semanas, luego que el presidente se lanzó contra la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Lucía Piña, en redes sociales apareció una amenaza de muerte en contra de ella. Además, durante el mítin de López Obrador del 18 de marzo pasado en el Zócalo de la CDMX, sus simpatizantes prendieron fuego a una figura que representaba a Piña Hernández.