Cuál es el compuesto de plantas que ayuda con los problemas gástricos según la UNAM

De acuerdo con una investigadora de la Máxima Casa de Estudios en México, al menos el 10% de los adultos ha padecido una úlcera o patologías que requieren de un diagnóstico especializado

De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) el daño gástrico es un fenómeno multifactorial (Moment RF)

El daño gástrico se ha consolidado como un problema común en la salud de miles de mexicanos y mexicanas. Y es que, de acuerdo con Elizabeth Arlen Pineda profesora de la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza, la mucosa gástrica se encuentra constantemente expuesta a factores como el propio pH o el consumo irritantes, alcohol, tabaco o fármacos antiinflamatorios -por ejemplo aspirina, ibuprofeno, diclofenaco-.

Ante ello, la investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) detalló que existen una serie de elementos que se encargan de defender el tracto gástrico, tales como el moco y el bicarbonato, el mismo epitelio gástrico, la microcirculación que existe en la zona y la inervación sensorial, los cuales en conjunto se denominan como defensa mucosa.

Fue durante el Seminario Académico del Departamento de Farmacia de la Facultad de Química que la experta destacó la importancia de identificar que en esa protección las prostaglandinas tienen un papel importante al inhibir la secreción ácida del estómago, no obstante, en la medicina tradicional mexicana existen compuestos de origen natural que podrían contribuir a reducir el daño gástrico a través de mecanismos de acción que proporcionan efectos antiinflamatorios y antioxidantes.

¿Qué son las gastropatías?

El daño gástrico es ocasionado por afecciones en la mucosa (Especial)

De acuerdo con un boletín informativo publicado por la Dirección General de Comunicación Social de la UNAM, las gastropatías se pueden considerar como afecciones que ocurren en la mucosa y que son provocadas también por agentes irritantes, como por ejemplo algún alimento encurtido o en vinagre, picantes, consumo de tabaco, alcohol, cafeína e incluso estrés.

La experta de la Máxima Casa de Estudios detalló que son limitadas y autoresolutivas, lo que implica que en cuanto se eliminan dichos estímulos, la gastropatía cede. Pese a ello, si la gastritis o la irritación de la mucosa, no se resuelven favorablemente o si la exposición a los agentes es continua podría desencadenarse una úlcera gástrica.

“Todas estas enfermedades del tracto gástrico generan complicaciones como hemorragias, perforaciones y obstrucciones”, apuntó Elizabeth Arlen Pineda, profesora de la FES Zaragoza.

Tratamientos para las gastropatías

Algunos de los fármacos y tratamientos para tratar las gastropatías podrían resultar contraproducentes de acuerdo con la investigadora de la Universidad Nacional autónoma de México (UNAM) (Gettyimages)

Las gastropatías, apuntó la profesora de FES Zaragoza, requieren un diagnóstico especializado que comúnmente contemplan endoscopías o exámenes de laboratorio y tratamientos 100% quirúrgicos que implican un fuerte gasto económico tanto para el paciente como para los sistemas de salud.

La farmacología y terapéutica desarrolladas en los últimos 10 años permitieron disminuir el daño gástrico por la bacteria Helicobacter pylori, lo que llevó a descubrir el verdadero enemigo silencioso: los AINES o fármacos antiinflamatorios no esteroides.

Dichos fármacos -como el ibuprofeno o el diclofenaco- son utilizados de manera continúa para aliviar el dolor posquirúrgico o musculares así como para las adultos mayores con enfermedades crónico-degenerativos y problemas artríticos. Además de que es posible adquirirlos en cualquier farmacia sin receta, propiciando en gran medida su automedicación.

Del mismo modo, Elizabeth Arlen Pineda advirtió que el uso de ranitidina y omeprazol como coterapia a largo plazo no es recomendable por la posibilidad de aparición de lesiones gástricas premalignas o daño renal.

“La toxicidad gástrica por AINES representa una epidemia silenciosa, nadie ha reportado muerte por el consumo de esos fármacos sino por hemorragia digestiva. Ante ello, existe la necesidad de desarrollar nuevas terapias, pues la farmacéutica actual no logra evidenciar la disminución de los casos de gastritis o úlceras”, señaló la investigadora de la UNAM.

La alternativa de la medicina tradicional

El Cuachalalate es una de las opciones de medicina tradicional para tratar el daño gástrico (Gaceta UNAM)

La investigadora de la Máxima Casa de Estudios en México informó que existen una gran cantidad de plantas que se utilizan de manera empírica para el tratamiento de enfermedades gastrointestinales entre las que destaca el cuachalalate (Amphipterygium adstringens), una corteza que se emplea como cicatrizante en este tipo de padecimientos.

Otra de las alternativas de medicina tradicional para dicho padecimiento es el chuchupate o Ligusticum porteri cuyo extracto presenta un efecto gastroprotector en el daño con etanol. Cuando se le caracteriza se distingue el compuesto diligustilida, en el que está incluida la participación de prostaglandinas y algunos mediadores del efecto antioxidante.

Elizabeth Arlen Pineda se ha dado a la tarea de analizar la combinación farmacológica de ambos compuestos para obtener un tercer mecanismo de acción con una posible mayor eficacia a menor dosis, lo que contribuye a disminuir efectos adversos.