En la ahora alcaldía Iztapalapa una de las tradiciones más antiguas es el Vía crucis en representación de la Pasión de Cristo, un evento que se realiza año con año en Semana Santa y que tiene lugar en el cerro de la Estrella.
Esta representación mexicana se basa a partir del pasaje bíblico en el que relata la eucaristía de la crucifixión de Jesús de Nazaret, después de su visita a los 7 templos. Un recorrido en donde el Hijo de Dios es golpeado y humillado por soldados romanos.
Ante gran narrativa de la tradición católica, la alcaldía Iztapalapa, como en otras partes del mundo, se prepara una representación teatral desde meses antes, pues en ella no solo son colocadas grandes escenografías, sino que además son designados los papeles que representarán a las figuras bíblicas.
El papel más importante de esta representación es Jesús de Nazaret, protagónico que es seleccionado a partir de ciertas características físicas, ya que dicho trabajo conlleva una preparación exhaustiva, tanto corporal como psicológica.
Año con año Jesús de Nazaret es interpretado por un joven de mediana edad que cuenta con las capacidades físicas para soportar el pesos de la cruz de madera que llevará consigo durante todo el recorrido.
Por lo general, los hombres que se apuntan a este papel son aquellos que desean pagar una manda o hacer una obra cristiana. Esta interpretación llega incluso a tener lista de espera para participar en ella y son los propios locatarios y autoridades parroquiales los encargados de escoger a Jesús de Nazaret.
Esta tradición católica de Iztapalapa data desde el año 1843, sin embrago, no existen registros de los personas que interpretaron los primeros papeles.
A pesar de ello, y de acuerdo con datos históricos, se sabe que las personas que actúan estas figuras religiosas deben ser originarias de la entidad (Iztapalapa), por lo que la organización y lo relacionado a esta corresponde a los locatarios.
La pasión de Cristo en Iztapalapa es un evento que fue catalogado como Patrimonio Cultural e Intangible de la Ciudad de México en 2012. En las últimas décadas ha sido televisado ante la importancia y asistencia de capitalinos e incluso por habitantes de otros estados de la República y otros países.
Cómo fue la primera representación del Vía crucis en Iztapalapa
Según cuentan los pobladores de la alcaldía, la primera representación de la entidad fue realizada tras cumplir una manda, pues la localidad fue azotada por una pandemia de cólera en 1842.
La enfermedad causó miedo entre la población por lo que la comunidad pidió ayuda al Señor de la Cuevita, y ante el milagro, los habitantes prometieron hacer este evento año con año.
De acuerdo con algunos testimonios orales de locatarios, la representación de la Pasión de Cristo ya se realizaba con anterioridad a la pandemia, y esta enfermedad solo potencializó la asistencia y devoción por esta fecha.
Uno de los cambios significativos que tuvo esta organización fue en 1870 y 1880, cuando los ancianos de los pueblos correspondientes a la localidad indicaron que los papeles serían interpretados por niños y niñas. Sin embargo, esta petición no se llevó a cabo después de un tiempo.
El via curcis de Cristo en Iztapalapa ha sido un evento abierto al público desde sus inicios, sin embargo, durante la segunda guerra mundial, en algunos años, fueron realizadas “a puertas cerradas”.
Otra de las fechas en las que esta representación también se vio imposibilitada de realizarse de manera habitual fue en el 2020 y 2021, cuando por la pandemia del Covid 19 tuvo que ser “suspendida” como se le conocía, y solo fue transmitida de forma televisiva incluso para los pobladores de la alcaldía.