El coordinador de Morena en el Senado de la República, Ricardo Monreal Ávila, invitó a los integrantes de su partido a no “satanizar” la manifestación que se dio en el Zócalo de la Ciudad de México, la cual tuvo por fin protestar contra el llamado “Plan B” de la reforma electoral propuesta por Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Monreal aseguró que, por su parte, no condenaría la movilización, sino que —en su lugar— es conveniente aplicar un análisis para saber en qué está fallando Morena y por qué se alejó de ciertos sectores sociales.
“La expresión que se observó en la pasada marcha del domingo debe de ser analizada en su dimensión apropiada. De mi parte, no voy a objetivarla, ni siquiera a descalificarla. Es un derecho que tenemos todos”, expresó el también presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara Alta a través de un video colgado en sus redes sociales este lunes 27 de febrero.
En ese sentido, aseveró que él y sus aliados políticos también marcharon cuando fueron oposición, por lo que ahora les corresponde ser tolerantes y reconciliarse desde dentro y hacia afuera.
“Nosotros lo hicimos (marchar) como oposición y muchas veces llenamos el Zócalo, hacíamos marchas, y aunque nosotros sí recibíamos descalificaciones por nuestras marchas, nosotros no debemos hacerlo”, reflexionó el aspirante a la candidatura presidencial de su partido rumbo a 2024.
De acuerdo con el zacatecano, los principales grupos con lo que el partido fundado por AMLO se tiene que reconciliar son, principalmente, las clases medias (a quienes señaló por ayudar a conseguir “el triunfo en 2018″), al sector económico y empresarial, a los medios de comunicación, así como al movimiento feminista y a todos los demás sectores que acompañaron a la Cuarta Transformación hace casi cinco años. “Tenemos que reencontrarnos con ellos”, sugirió.
Por otra parte, “lejos de satanizar” las expresiones políticas y ciudadanas —como lo fue la movilización en “defensa” del Instituto Nacional Electoral (INE) frente a las reformas impulsadas por Morena— exhortó a revisar las motivos de dichas manifestaciones; analizar en dónde está fallando el instituto político y con ello, “recomponer nuestra relación” con los grupos demandantes.
Los pleitos internos, los procesos de conflicto y de confrontación interna lo único que hacen es alejarnos de la posibilidad de la cohesión
“Morena tiene que actuar bajo características de prudencia, de sensatez, de inclusión, de unidad. Si nosotros queremos mantener en el poder nuestro movimiento social, es la hora de la unidad”, expresó mientras en el material audiovisual aparecían fotografías suyas junto a las demás “corcholatas”, como Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López, así como compañía del presidente López Obrador y el político Cuauhtémoc Cárdenas.
En tanto, dicho discurso conciliador contrastó por lo expresado por el dirigente nacional del partido, Mario Delgado, así como por el mismo AMLO durante su conferencia mañanera de este lunes.
Delgado Carrillo aseguró que la marcha fue para defender “los intereses del viejo régimen”, mientras que López Obrador llamó “mapaches”, “tranzas” y neoliberales a los convocantes, entre a quienes mencionó al ex ministro de la Suprema Corte (SCJN), Ramón Cosío, al ex funcionario foxista Jorge Castañeda y al historiador Enrique Krauze.
“Este movimiento, esta protesta tiene como pantalla lo del Plan B de la reforma electoral, pero lo cierto es que no es una marcha de la ciudadanía, es una manifestación de la derecha en contra de la transformación que se está viviendo a nivel nacional”, expresó Mario Delgado.
Por su parte, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, también denostó la congregación en el Zócalo. “¿Quién convocó? ¿Quiénes son los que dicen defender la democracia? No los vi hablando del fraude electoral del 2006″, expresó.