El municipio de San Luis Río Colorado, Sonora, se ha convertido en el nuevo foco de la violencia que ha propiciado el conflicto entre dos células enemistadas del Cártel de Sinaloa que se pelean el control de la región.
Por un lado están los hijos del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, mejor conocidos como “Los Chapitos”: Jesús Alfredo e Iván Archivaldo; y por el otro, la célula de “Los Rusos”, que operan al servicio del viejo compadre del capo: Ismael “El Mayo” Zambada García.
Las estadísticas no mienten. En dicho municipio los homicidios crecieron 41% en el último año, y la ciudad de San Luis Río Colorado concentró el 85% de las muertes violentas cometidas en Sonora en el año pasado.
Además, entre 2019 y 2022 se cometieron más de 400 asesinatos. Ahí son recurrentes las balaceras, ejecuciones, levantones, desapariciones y fosas clandestinas.
blockquote class="twitter-tweet">Asesinan a policía en San Luis Río Colorado en Sonora de @AlfonsoDurazo
— José Díaz (@JJDiazMachuca) February 19, 2023
Y mientras la @GN_MEXICO_ escoltaban a Karely Ruíz pic.twitter.com/GJMOyLpdds
Los eventos violentos más recientes arrancaron el 17 de febrero pasado, cuando dos cadáveres decapitados fueron encontrados a la orilla del Río Colorado, y más tarde un tercero a pocos metros de ahí.
Al día siguiente, el sábado, el comandante de la policía municipal, Silvio Domínguez Villapuda, se encontraba de descanso. Conducía por la avenida Obregón cuando una camioneta Toyota Tundra color blanco le cerró el paso.
La siguiente escena fueron varias secuencias de disparos y la camioneta del comandante estrellada contra un poste del alumbrado público. Pero él no, él todavía seguía vivo y tuvo tiempo de hacer más disparos.
En un primer momento los agresores se habían alejado, pero volvieron de manera intempestiva a rematarlo. Sin embargo, cuando los servivios de emergencia aparecieron Domínguez Villapuda se encontraba agonizante.
Entonces sobrevino una gran movilización policiaca en las calles aledañas. La camioneta Toyota fue detectada después en la proximidades de una gasolinera ubicada en la colonia Ganadera. Ahí habían intentado ocultarse los agresores.
Después vino un segundo enfrentamiento. Imágenes publicadas en las redes sociales mostraron la camioneta completamente perforada por el impacto de proyectiles de alto poder, así como un muro de concreto totalmente agujereado.
Las autoridades reportaron la muerte de cuatro de los atacantes de Domínguez Villapudua, cuyos cuerpos quedaron en el interior del vehículo, y la detención de diez sospechosos que habrían estado involucrados en los hechos.
Fue un ataque “contra la corporación y la sociedad misma”, se lamentó el alcalde de San Luis Río Colorado, Santos González Yescas.
Unos días antes de la aparición de los cuerpos decapitados junto al río, incluso unos días antes del ataque al comandante de la municipal, dos cateos realizados en la colonia Ruiz Cortines derivaron en el aseguramiento de mil 198 kilos de mariguana.
El alcalde González Yescas denunció a principios de diciembre la irrupción de un convoy de 50 camionetas repletas de sicarios que habían salido de Ciudad Coahuila, Baja California, que habían atravesado el poblado de Luis B. Sánchez, ya en territorio de Sonora, y que habían incursionado en San Luis Río Colorado para ejecutar a varias personas y atacar “narcotiendas” que vendían mercancía de un grupo rival.
“Ninguna autoridad estatal de Sonora o Baja California, ni las agencias de seguridad del gobierno de México se dieron cuenta de la incursión”, protestó el alcalde.
Las camionetas —hoy se sabe que estaban tripuladas por gatilleros de los Chapitos— iniciaron su recorrido mortal a 50 kilómetros de San Luis Río Colorado. El comando ejecutó a tres personas en la comisaría de Luis B. Sánchez y luego fue a buscar a otras siete a las calles de San Luis —pobladas de “narcotienditas” y casinos clandestinos.
“Intentaban ganar territorio”, explicó la fiscalía estatal.