Se armó el sonidero frente a la casa de Sandra Cuevas pero culminó en confrontación con autoridades

Pese a las indicaciones y advertencias del gobierno de la Ciudad de México, un grupo de civiles se manifestaron frente al domicilio de la alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, en la mañana de este domingo 19 de febrero. Lo anterior debido a la prohibición de los llamados “sonideros”.

Bajo el sol de la capital, vecinos de la localidad y personas de la tercera edad tomaron las calles para ponerse a bailar mientras otras personas tocaban ritmos latinos de fondo. “¡Qué viva la música! ¡Qué viva el baile!”, expresaban los manifestantes ante las cámaras de medios locales que grababan el jolgorio en la colonia Santa María La Ribera.

Sin embargo, la fiesta duró poco tiempo, pues al cabo de unos instantes personal de la alcaldía Cuauhtémoc arribó al lugar para apagar el ruido y desalojar a las personas que bailaban frente al parque del Kiosko Morisco, donde no se había permitido instalar equipos de sonido debido a las supuestas denuncias de los habitantes.

Fue así como de un momento a otro, los pasos de baile y los ritmos musicales fueron sustituidos por gritos y empujones entre vecinos y autoridades locales. Tras unos instantes de confrontación e intercambio de palabras altisonantes, la situación logró ser controlada y no pasó a mayores.

Ante ello, la alcaldesa Sandra Cuevas reiteró ante medios locales que no se va a permitir la instalación de los “sonideros” en la alameda de Santa María La Ribera, pues indicó que los manifestantes (alredor de 20) solían acudir cada domingo a dicho lugar para bailar. Así durante tres años. Sin embargo, señaló que el sonido era demasiado alto y generó quejas entre los habitantes de la zona.

Asimismo, Cuevas precisó que no se le está prohibiendo a la gente que baile, sino que se les están dando dos opciones para que sigan con sus actividades recreativas: que las hagan en el deportivo Cuauhtémoc o en la casa de cultura que está a un costado del Kiosko Morisco, detalló desde su departamento.

De acuerdo con Sandra Cuevas, las autoridades de la alcaldía Cuauhtémoc llevaban cerca de cuatro meses invitando al sonidero “colectivo Colombia” a que bajara la música durante sus bailes de los domingos, debido a la contaminación auditiva y las quejas de los vecinos. Además, les indicó que estaba prohibido tomar alcohol en la vía pública y “robarse la luz”.

“Es por eso que hace un par de semanas tomé la decisión de pedirle al sonidero una vez más que disminuyera el volumen de la música”, precisó la alcaldesa. Debido a que hicieron caso omiso a las indicaciones, la alcaldesa optó por retirarlos de la alameda Santa María La Ribera. Ante esas medidas, el sábado 18 de febrero se convocó a una protesta pacífica en el cruce de Jaime Torres Bodet y Manuel Carpito.

Dado que se trataba de una protesta frente al domicilio de Sandra Cuevas, el secretario de Gobierno de la CDMX, Martí Batres, advirtió a través de sus redes sociales que las autoridades capitalinas no avalaban la manifestación en los alrededores de las casas de funcionarios públicos, pues señaló que “debe respetarse la esfera personal de cada quien”. Por ello, hizo un llamado a no realizarla.

En su momento, la alcaldesa de Cuauhtémoc responsabilizó a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, por supuestamente “promover la alteración del orden público y la paz” en dicha alameda. Lo anterior luego de que señalara que grupos afines a Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) convocaran a manifestarse frente a su casa este domingo con el fin de desastibilizar su gestión.