El día que Los Zetas masacraron a un grupo musical en medio de su guerra contra el Cártel del Golfo

El cártel de la última letra fue el encargado de inaugurar el conteo de masacres durante el sexenio de Enrique Peña Nieto

La ejecución de los integrantes del grupo Kombo Kolombia fue por una disputa con el Cártel del Golfo. (Twitter/Facebook)

La guerra entre grupos del crimen organizado ha manchado al país con un sinfín de lamentables sucesos y víctimas de múltiples esferas, desde la ciudadanía hasta el ámbito político y el artístico.

En enero de 2013 tuvo lugar uno de los episodios más trágicos que llenó de pena a la escena musical, ya que 17 integrantes del grupo Kombo Kolombia (entre músicos y asistentes) fueron secuestrados y ejecutados por Los Zetas.

Para ese entonces, Los Zetas ya habían establecido una red de contactos internacionales para el tráfico de drogas y se habían encargado de aterrorizar al país con su brutalidad.

Los integrantes del grupo Kombo Kolombia fueron masacrados en el municipio de Mina. (GABRIELA PÉREZ MONTIEL /CUARTOSCURO)

A pesar de haber nacido como un brazo armado del Cártel del Golfo, los de la última letra incrementaron su presencia y capacidad de combate, lo que motivó su separación y confrontación directa con la organización después de que Osiel Cárdenas Guillén fuera extraditado a Estados Unidos.

En medio de su pugna contra el Cártel del Golfo en territorios de Nuevo León y Tamaulipas, Los Zetas perpetraron la primera masacre del sexenio de Enrique Peña Nieto y una de las más atroces en la historia reciente de México.

Todo fue una trampa

Kombo Kolombia era un grupo de vallenato con poca trayectoria, pero que había comenzado a ganar popularidad al norte del país.

Reportes periodísticos señalan que el 23 de enero fueron contactados por José Isidro Cruz Villarreal, alias “El Pichilo”, para tocar en un evento. “El Pichilo” era en ese tiempo el líder de Los Zetas en Nuevo León.

La masacre de Kombo Kolombia fue la primera del sexenio de Enrique Peña Nieto. (GABRIELA PÉREZ MONTIEL /CUARTOSCURO)

Antes de dicho acuerdo, Kombo Kolombia ya había tocado en distintos recintos y celebraciones del grupo criminal. Incluso las indagatorias arrojaron que este cártel había apoyado financieramente a la banda musical para impulsar su carrera.

Sin embargo, esta presentación era sólo el camuflaje para una atroz venganza. La noche del 25 de enero, Kombo Kolombia arribó a una reunión en la finca La Carreta, ubicada en el municipio de Hidalgo.

Después de un par de horas de música, un grupo de hombres sometió a los artistas y a otros miembros de su equipo de producción y los privó de su libertad, todo bajo las órdenes del “Pichilo”.

El brutal ataque llenó de luto a la escena musical. (GABRIELA PÉREZ MONTIEL /CUARTOSCURO)

Sus voces e instrumentos fueron silenciados por al menos doce sicarios, quienes se los llevaron a un rancho abandonado del municipio de Mina, llamado Las Estacas, muy cerca de la carretera Monterrey - Monclova.

En dicha locación, 17 integrantes de la banda fueron torturados, hincados y fusilados uno a uno con un tiro en la cabeza. Por si fuera poco, los criminales que trabajaban para “El Pichilo” arrojaron los cuerpos al fondo de un pozo.

Trece músicos, tres miembros del equipo y un ingeniero de sonido fueron las víctimas de aquella trágica noche. Sólo un integrante de la banda sobrevivió. Las versiones extraoficiales indicaron que Los Zetas lo dejaron libre para que difundiera la noticia y, con ello, enviara un mensaje a sus rivales.

El pozo donde fueron arrojados los cuerpos de los músicos de Kombo Kolombia. (GABRIELA PÉREZ MONTIEL /CUARTOSCURO)

El joven que logró salvarse del fatal destino que tuvieron sus compañeros fue quien llamó a las familias del resto de integrantes para darles la noticia. Los cuerpos fueron rescatados el 26 de enero por elementos de Protección Civil del Estado. “Poderoso Kombo Kolombia, los creadores de la mejor cumbia del planeta”, decía en las playeras con las que dieron su última presentación.

En marzo de 2014 las autoridades capturaron a “El Pichilo” y fue hasta ese entonces que se tuvo certeza de la causa de la masacre. Tras su detención, confesó que Los Zetas se habían sentido traicionados por Kombo Kolombia, pues también se habían presentado en eventos financiados por el Cártel del Golfo.

“Según el detenido, en sus inicios los apoyaron y en virtud de que estaban participando en tocadas del grupo antagónico (del Golfo), es por eso que deciden eliminarlos”, detalló el procurador estatal de Nuevo León de ese entonces, Adrián de la Garza.

Fue así, por una “traición”, que Los Zetas acabaron con la vida de 17 personas y la carrera de una agrupación que había comenzado a ganarse el cariño de la gente.