El pasado viernes 20 de enero, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) habló en su conferencia de prensa mañanera sobre la salud del titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, luego de que por medio de columnas periodísticas se diera a conocer que la salud de éste se encontrara delicada e incluso, que habría sido llevado de emergencia a un hospital de Estados Unidos para operarlo de la columna en los últimos días del 2022.
En esa ocasión, el presidente dijo que “está muy bien, está muy bien Alejandro Gertz Manero, está haciendo su trabajo, pues como todos necesitamos a veces alguna reparación, pero está muy bien”.
Y ante los cuestionamientos de la prensa, que siguieron, el mandatario federal recalcó que “está muy bien, y es una buena persona y un buen servidor público”.
Tras esto, el lunes 23 de enero, de nuevo en su conferencia de prensa mañanera, López Obrador se pronunció sobre el caso y criticó los rumores malintencionados que han circulado en redes sociales sobre el estado de salud del titular de la Fiscalía General de la República.
“Ha habido mucha especulación y una actitud muy, no quiero usar la palabra, quiero suavizarla, yo diría, la voy a usar, miserable, en torno a este asunto porque vi un video, digo un mensaje, creo que en tuit y hay muchos, deseando la muerte, eso no se le puede desear a nadie”, expresó el mandatario.
Y es que muchos rumores han corrido respecto a la salud de Gertz Manero, y por ende, de su puesto como fiscal general de la República. Este martes, en su columna titulada La Cuarta Transformación, el periodista Darío Celis escribe que el estado de salud de Gertz Manero le impide seguir al frente de las funciones que su responsabilidad le exigen.
Y es que según el columnista del medio El Financiero, el fiscal ya aceptó dejar el cargo y “lo que está en la mesa con la Secretaría de Gobernación es el mecanismo de transición, en el que el propio Gertz llevará mano para firmar el nombre de su sustituto”.
Sin embargo, en Palacio Nacional no se quiere seguir la vía formal de mandar una terna al Senado de la República, esto por el alto costo político que implica dejar en manos del presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal, la designación de un nuevo Fiscal General.
La ruta más viable, y en la que incluso el propio Gertz Manero estaría más cómodo, sería la de palomear a un vicefiscal encargado del despacho, y al cual nombraría directamente el presidente López Obrador.
“Tiene que ser alguien de toda la confianza del tabasqueño y del propio Gertz Manero, quien aseguraría un blindaje a sus dos principales colaboradores y operadores: Juan Ramos y Germán Castillo Banuet”.
Según Darío Celis, alguien que llena el perfil y que en los últimos diez días se ha movido es el expresidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar, quien desde hace por lo menos un año, ha sonado como posible relevo de Gertz Manero en la FGR. Y aunque ahora se encuentra impedido legalmente, la ley presenta un resquicio que le permitiría acceder como vicefiscal encargado del despacho y mantenerse así los próximos dos años, en lo que vence su impedimento.
En la milicia, dice Celis, también se sigue de cerca la salida de Gertz Manero, y no escatiman esfuerzos para colar al que podría ser otro fiscal militar. Se trata de Miguel Carrasco, Fiscal General de Justicia Militar.
Celis explica que es cuestión de semanas para que se dé entrada a un nuevo fiscal que pueda concluir el sexenio de López Obrador.
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