¿Qué especies viven en el Golfo de México, el lugar que Trump quiere renombrar como Golfo de América?

Esta zona semi-cerrada, compartida por tres países, alberga más de 1.500 especies en hábitats únicos, desempeñando un rol vital en el equilibrio ambiental

Guardar
El cambio climático amenaza la
El cambio climático amenaza la supervivencia de especies que habitan en esta región (Greg McFall/Wikimedia, Ramos Keith/ Wikimedia, Claudio Giovenzana/Wikimedia)

El Golfo de México es un epicentro de biodiversidad que alberga una vasta variedad de especies marinas y terrestres, muchas de ellas únicas en el mundo.

Desde los majestuosos tiburones ballena hasta las coloridas tortugas carey, este ecosistema desempeña un papel crucial en la salud del planeta.

En los últimos días, este emblemático cuerpo de agua ha acaparado atención no solo por su importancia natural, sino también por el anuncio realizado el pasado 7 de enero por Donald Trump, próximo presidente de Estados Unidos, quien declaró su intención de renombrar el Golfo de México como “Golfo de América”.

Un reino lleno de vida

Con una superficie de 1.623
Con una superficie de 1.623 millones de kilómetros, el golfo es hogar de más de 1.500 especies marinas y costeras (Wikimedia)

Con una superficie aproximada de 1.623 millones de kilómetros cuadrados, México comparte el Golfo de México con Estados Unidos y Cuba. Este mar semi-cerrado, cuyas aguas se conectan con el océano Atlántico, es la novena mayor masa de agua del planeta.

Este lugar destaca por su diversidad biológica, albergando una combinación única de hábitats marinos y costeros como estuarios, manglares, praderas de pastos marinos, arrecifes de coral y marismas, áreas que proveen refugio y sustento a más de 1.500 especies, según Oceana México, organización internacional enfocada en la conservación de los océanos.

En esta región se han identificado unas 1.541 especies de peces, además de una amplia variedad de fauna marina, como tortugas, tiburones, ballenas y aves marinas, todas fundamentales para mantener el equilibrio de la cadena trófica. Asimismo, alberga 78 especies endémicas, exclusivas de esta área.

Delfines

El delfín nariz de botella
El delfín nariz de botella es clave en ecosistemas costeros y se encuentra amenazado por la contaminación (Martina Nolte Lizenz/Wikimedia)

El Golfo de México es hogar de diversas especies de delfines, como el delfín de Fraser, el delfín de Risso y el delfín moteado del Atlántico. Entre ellos, destaca la tonina o delfín nariz de botella, un depredador clave en los ecosistemas costeros.

Su comportamiento social y su sensibilidad a cambios en el medio ambiente lo convierten en un indicador de la salud del ecosistema. Sin embargo, enfrenta amenazas como la contaminación y la degradación de su hábitat, según Oceana México.

Manatí de las Antillas

El manatí contribuye al equilibrio
El manatí contribuye al equilibrio de los pastos marinos, pero la UICN lo clasifica como vulnerable (Galen Rathbun/Wikimedia)

El manatí del Caribe, habitante emblemático de zonas costeras y estuarios, prefiere aguas cálidas y poco profundas, donde encuentra alimento y refugio.

Este herbívoro contribuye al equilibrio de los pastos marinos y mejora la calidad del agua. Clasificado como “vulnerable” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), enfrenta riesgos como la pérdida de hábitat y su baja tasa de reproducción debido al desarrollo costero.

Ballenas

Las aguas del golfo conectan
Las aguas del golfo conectan con el Atlántico, formando un ecosistema único compartido por tres países (Wikicommons)

La profundidad y diversidad del Golfo de México lo convierten en un hábitat ideal para ballenas como la franca del norte, la azul y la jorobada.

Esta última realiza migraciones entre zonas de alimentación en el Atlántico Norte y áreas de reproducción en el Caribe, atrayendo turistas con sus cantos y saltos.

Aunque la UICN las clasifica como de “preocupación menor”, enfrentan amenazas como colisiones con embarcaciones y la degradación de su hábitat, según Oceana México.

Tortugas marinas

La tortuga lora es una
La tortuga lora es una de las cinco especies que dependen del golfo para su supervivencia (Titiréunion/Wikimedia)

En el Golfo habitan cinco de las siete especies de tortugas marinas: lora, golfina, verde, carey y caguama. Estas tortugas controlan poblaciones de medusas, invertebrados y pastos marinos, desempeñando un papel esencial en el equilibrio ecológico. Sin embargo, todas están clasificadas como “vulnerables” o “en peligro crítico”.

Atún Aleta Azul del Atlántico

Esta especie desova en estas
Esta especie desova en estas aguas ricas, esenciales para mantener su ciclo reproductivo (OpenCage/Wikimedia)

El atún aleta azul es una de las especies clave de pesca en el Golfo. Estas aguas, ricas en nutrientes, son una importante zona de reproducción, donde los adultos migran para desovar y criar a sus larvas.

Su captura está estrictamente regulada debido a su importancia comercial y ecológica. Clasificado como “en peligro” por la UICN, es vulnerable a la sobrepesca, advierte Oceana México.

Jeniguano Bocón

El Golfo de México es
El Golfo de México es hogar de 78 especies endémicas, exclusivas de esta región (SEFSC Pascagoula Laboratory/Wikimedia)

Este pez, de cuerpo alargado y comprimido, posee una cabeza redondeada, boca pequeña y labios delgados. Su coloración plateada con rayas amarillo bronce y una mancha oscura en la base de la cola lo distingue, mientras que los juveniles presentan rayas adicionales y manchas en la cola.

Clasificado en 2011 como de “preocupación menor”, habita arrecifes someros y zonas costeras, según el Zoológico del Smithsonian.

Langosta Espinosa

La langosta espinosa migra largas
La langosta espinosa migra largas distancias en arrecifes de coral, pero afronta amenazas por el cambio climático (Douglas Whitaker / Wikimedia)

Este crustáceo nocturno, caracterizado por la ausencia de tenazas, vive en arrecifes coralinos y migra en filas a lo largo del fondo marino. Es un recurso valioso para comunidades costeras, capturado tanto por pescadores artesanales como comerciales.

Su dieta incluye algas, caracoles y cangrejos, y su presencia indica la salud del arrecife. Las tormentas y el aumento de temperatura, características del cambio climático, amenazan su hábitat y cadena alimentaria, según la organización enfocada en la conservación World Wildlife Fund (WWF).

Caracol rosa

Este caracol destaca por su
Este caracol destaca por su concha de tonalidades rosadaas, además que puede llegar a crecer hasta 30 centímetros (H. Zell/Wikimedia)

El caracol rosado es un molusco gasterópodo de gran valor cultural y económico desde tiempos precolombinos. Sus larvas se desarrollan en aguas abiertas alimentándose de fitoplancton, mientras que los juveniles prosperan en pastos marinos.

Ha sido una especie valorada desde tiempos precolombinos, utilizada por los indígenas arawak y caribes en ceremonias, comercio y como ornamento. Su pesca ha crecido significativamente en las últimas décadas, causando una disminución de la población y cierres de áreas de recolección, según el Centro para la Diversidad Biológica, organización dedicada a proteger especies en peligro de extinción.

Guardar