Elegir un gato como mascota conlleva una gran responsabilidad, pues como animal de compañía depende completamente de las personas que están a su cargo. Cada especie tiene necesidades específicas por eso es importante tener en cuenta aspectos como su personalidad, comportamientos, tipo de pelaje y tamaño.
Otro factor importante a considerar es la edad, un felino recién nacido precisa de muchos más cuidados que uno adulto y aunque aprenden rápido es importante analizar esta situación porque va a necesitar que inviertas más tiempo para que se adapte a tu estilo de vida.
El proceso de adaptación de un felino a su nuevo hogar es paulatino, generalmente inspeccionan todo el lugar para sentirse lo más cómodo posible. Este tipo de animales de compañía necesita de espacios diferenciados, es decir, que utilizan determinados lugares para alimentarse, descansar y una zona de higiene.
Por estos motivos te compartimos las características y necesidades del Manx que te pueden ayudar al momento de elegirlo como un nuevo compañero de vida.
Necesidades del Manx
Originario de la isla de Man, a primera vista, el gato manx puede parecer tranquilo y con poca energía, pero no te dejes engañar por las apariencias. Le encanta la actividad y corretear por todas partes o bien jugar, ya sea solo o con sus amigos humanos. Aunque es un gato verdaderamente dulce y accesible, el manx puede no estar muy cómodo en presencia de mucha gente, así que es mejor evitar estas situaciones.
Son grandes dormilones
Los gatos como animales mamíferos pasan la mayor parte del tiempo descansando, regularmente duermen entre 12 y 18 horas diarias con periodos intermitentes que pueden durar hasta 113 minutos, de acuerdo con información de Sleep Foundation, organización que se encarga de estudiar los patrones de comportamiento durante el sueño.
Descansar al lado de tu mascota trae grandes beneficios para los seres humanos. La doctora Dana Varble, directora de la Comunidad Veterinaria de Norteamérica, detalló en una entrevista para CNN que dormir a lado de un gato ayuda a estrechar en gran medida la relación dueño-mascota.
El académico de la Universidad de Bristol, John Bradshaw, compartió en una entrevista para National Geographic que los felinos “adoptan” a los humanos como integrantes de su grupo y comúnmente interactúan con ellos como si fuera de la misma especie.
Los gatos externan su cariño levantando la cola y formándose en el cuerpo de sus dueños. Bradshaw detalló que estos animales saben que sus propietarios son más grandes que ellos, pero no adaptan su conducta social cuando interactúan con los humanos.