Estos son los alimentos navideños que puedes compartir con tus gatos según veterinarios

Antes de ofrecer cualquier alimento humano a su mascota, es fundamental consultar a un veterinario

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Es importante que consultes a
Es importante que consultes a tu veterinario antes de realizar cualquier cambio en la dieta de tu mascota (Imagen Ilustrativa Infobae)

Durante las festividades navideñas, compartimos momentos especiales con nuestros seres queridos, incluidos nuestros compañeros felinos.

Aunque hay algunos alimentos que pueden consumir nuestras mascotas durante esta temporada, es importante saber cuáles pueden disfrutar sin poner en riesgo su salud.

Descubre qué delicias navideñas puedes compartir con tu gato para que también forme parte de las celebraciones, y aprende cómo hacerlo de manera segura para garantizar su bienestar durante las fiestas.

¿Qué puedo compartir con mi gato?

El pavo es un alimento
El pavo es un alimento seguro para las mascotas (Imagen Ilustrativa Infobae)

Si deseas incluir algo diferente en la dieta de un gato, es esencial que optes por pequeñas cantidades de proteínas magras y sin condimentar, de acuerdo con el medio especializado en animales, Daily Paws quien contó con el apoyo de la veterinaria Genna Mize.

La especialista menciona que el pavo y el jamón, platillos tradicional de la época, son opciones seguras para las mascotas.

“Un bocado de pechuga de pavo simple probablemente esté bien, pero ¿la carne oscura cubierta con salsa? Eso no se puede hacer. ¡Demasiada grasa! ¡Demasiado sodio! Y algunos condimentos (por ejemplo, ajo en polvo) también son tóxicos”, menciona Mize.

El puré de batata, las judías verdes cocidas, los arándanos crudos finamente picados, la pulpa de pera sin piel ni semillas, y el puré de calabaza, son opciones seguras para los felinos.

“La calabaza, rica en fibra, cocida o enlatada, es otro alimento navideño que los gatos pueden comer. No conviene llenarles el cuenco con ella, pero si tienen estreñimiento o diarrea, una cucharadita podría ayudar a aliviar sus problemas”, menciona el medio.

Los alimentos prohibidos

El chocolate debe evitarse a
El chocolate debe evitarse a toda costa, pues provoca consecuencias fatales para los felinos (Imagen Ilustrativa Infobae)

El chocolate, el ponche de huevo, los caramelos de menta, el pan de jengibre, las patatas machacadas con condimentos, las cebollas, el ajo, el xilitol, el alcohol, las uvas y las nueces de macadamia son sumamente dañinos, de acuerdo con la especialista.

El chocolate es uno de los alimentos más comunes en Navidad y debe alejarse lo más que se pueda de estos animales, pues su efecto en ellos puede ser mortal.

“La cafeína y la teobromina (metilxantinas) presentes en el café y el chocolate son particularmente tóxicas y pueden causar la muerte en el peor de los casos y malestar gastrointestinal en el mejor de los casos”, afirma la especialista.

Estos alimentos pueden ser altamente tóxicos para los gatos y causar desde malestar gastrointestinal hasta problemas más graves como daño hepático o renal.

Ejemplo de ello son las nueces de Australia. “Se desconoce la causa exacta de su toxicidad, pero las consecuencias pueden incluir vómitos, debilidad, letargo e incluso temblores”, menciona la especialista.

En caso de envenenamiento es crucial actuar de inmediato. Según expertos de Cats Protection, organización benéfica de Reino Unido no se debe esperar a que aparezcan síntomas de envenenamiento, ya que para entonces la salud del animal podría estar gravemente comprometida.

En situaciones donde el veneno es visible, es fundamental alejar al gato de la fuente de peligro lo más rápido posible. Llevar una muestra del veneno al veterinario puede ser de gran ayuda para determinar el tratamiento más efectivo. Sin embargo, se advierte que intentar inducir el vómito en el gato sin supervisión profesional podría ser contraproducente.

El veterinario podría solicitar que lleves al gato a la clínica de inmediato o, en algunos casos, ofrecer asesoramiento por teléfono. Es importante seguir las instrucciones del profesional y evitar tratar de remediar los síntomas por cuenta propia, ya que esto podría agravar la situación.

La rapidez en la respuesta y la consulta con un veterinario son esenciales para aumentar las posibilidades de recuperación del animal. La prevención y el conocimiento sobre los riesgos potenciales en el entorno del gato son también aspectos clave para evitar situaciones de envenenamiento.

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