La razón por la que los perros aúllan cuando alguien muere

En América Latina se tiene la creencia que los perros son animales capaces de ver seres sobrenaturales, animas, monstruos e incluso la misma muerte, pero la que más llama la atención son las de aquellos canes que aúllan de forma frenética.

Este fenómeno ha sido estudiado por la ciencia, misma que afirma no tener una respuesta definitiva, pues algunos mencionan que podría tratarse de la profunda inteligencia de los perros, de las emociones y la forma en la que procesan el mundo por medio de su organismo.

Sin embargo, una de las teorías más aceptadas hasta el momento es la que se encuentra relacionada con el sentido del olfato pues se dice que algunas especies son capaces de percibir el “olor de la muerte” intuyendo que sus dueños podrían perecer en instantes o días.

Los perros son animales sensibles a los aromas, por lo que pueden detectar cambios atmosféricos con el aroma, por lo que se teoriza que es posible percibir y diferenciar entre “el olor de la vida y el de muerte” o el que proviene durante el periodo de la agonía.

Según el sitio especializado en animales, Experto Animal, el olor de la muerte se genera por un tipo de feromonas conocidas como necromonas, que se liberan cuando el cuerpo se prepara para morir.

Hay dos tipos de necromonas, la cadaverina y la putrescina, estas desencadenan respuestas necroforécticas que a su vez genera reacciones de adaptación de la comunidad y del individuo próximo a la muerte el cual se distancia de su círculo social para evitar desequilibrios.

Dicho comportamiento es similar al que presentan los perros y los gatos cuando van a fallecer, por lo que cuando ven este cambio comienzan a detectar el olor de la muerte tienen como respuesta de una permuta en su ánimo, para finalizar emitiendo aullidos al morir alguien.

Cuando un can se encuentra cercano a la muerte de un familiar cuyo vínculo es muy próximo, es normal que se vea afectado por emociones negativas, por lo que aullar es una forma de regular su malestar emocional. Sin embargo, es probable que también presente signos de depresión, problemas de conducta, incremento de estrés y pérdida del apetito.

Es fundamental que los dueños ayuden a los perros a llevar este proceso, por lo que Experto Animal señala que se debe invitar a jugar, darle paseos, platicando con el cánido, dándole muestras de cariño, sorprendiéndolo con comida casera o un juguete nuevo.

En casos más graves, se aconseja que se lleve con “un veterinario que pueda tratarlo y que revise cómo se encuentra su estado de salud, pues la depresión en perros puede generar padecimientos que los dejen vulnerables a una serie de enfermedades que pueden agravarse con el tiempo”.

Según la marca de alimentos para mascotas, Purina, menciona que los aullidos se generan por razones diferentes a las enigmáticas, por ejemplo, hay perros que buscan llamar la atención de la familia, el dolor es otro factor por el que los cánidos hacen sonidos.

La ansiedad también es otro factor que provoca que los perros aúllan, cuando protegen su territorio lo hacen por medio de sonidos e incluso su comunicación.

Por ello es fundamental identificar el motivo por el que aúlla pues al generar una especulación de índole fantástica se podría ignorar cualquier causa de salud que puede agravarse si no se atiende a tiempo.