Tres cuidados básicos para proteger las patas de tu gato recomendados por veterinarios

Las patas de los gatos son herramientas esenciales para su vida diaria, desde brincar y trepar hasta jugar y cazar. Sin embargo, a menudo pasamos por alto la importancia de cuidar adecuadamente esas pequeñas pero poderosas extremidades.

Mantener las patas de tu felino en perfecto estado no solo asegura su bienestar, sino también su felicidad. Es crucial entender que sus almohadillas son sensibles y están expuestas a diferentes riesgos, como heridas o infecciones.

Saber qué cuidados básicos implementar puede marcar la diferencia entre un gato cómodo y uno con potenciales problemas de salud.

Las patas de tu gato son esenciales para su día a día, tanto como lo son tus manos y pies para ti. Como dueño, asegurarte de que mantenga sus patas en buen estado es clave para su bienestar.

Según la página oficial de Hill´s, la marca de comida de gatos, es importante mantener cuidadas las patas de tu gatos, pues utilizan sus patas para todo tipo de actividades.

En casa, caminan por distintas superficies, algunas de ellas no tan limpias, como el arenero. Si tiene acceso al exterior, podría encontrarse con terrenos irregulares y rocosos, pisar espinas y objetos punzantes o enfrentarse a superficies muy frías o calientes, dependiendo del clima.

“Mientras inspeccionas también debes buscar signos de posibles problemas. Si notas que tu gato cojea o no ejerce presión sobre una pata en particular, puede que tenga algo atascado o que se haya lesionado. Ten en cuenta que a los gatos se les da bien ocultar su dolor, así que tendrás que prestar mucha atención”, menciona la página.

Aunque a muchos gatos no les guste que le toquen las patas, puede ser útil hacerlo desde que es pequeño para que se acostumbre. También puede funcionar hacer uso de premios o algo que refuerce positivamente ese tipo de contacto.

Cuando logres manejar las patas de tu gato, revisa cuidadosamente en busca de arañazos, llagas o la presencia de objetos extraños. Si encuentras algo que se encuentra incrustado intenta usar pinzas para retirarlo con cuidado, si consideras que está muy enterrado tal vez sea una mejor opción llevarlo con un veterinario.

Es importante mantener cortas las uñas de tu gato, pues si están demasiado largas pueden hacer que tu felino se lastime. Cuando comienzan a atorarse en alfombras o alguna tela es señal de que deben ser cortadas. Además también se puede escuchar que chocan contra el piso cuando caminan.

Según Cats Protection, la organización benéfica de gatos más grande en Reino Unido, para comenzar a cortarlas debes tener todo listo antes de comenzar: cortauñas, premios, una toalla y asegurarte que las ventanas estén cerradas. Cuando estés listo debes sostener suavemente una de sus patas entre el dedo y el pulgar, aplicando una ligera presión hasta ver sus uñas, pero sin apretarlas.

Después debes usar el cortaúñas para recortar solamente la punta de la uña. No las cortes demasiado cortas para evitar lastimar a tu gato. Mantente alejado de la base de la uña cerca de los dedos, donde se percibe una zona rosada llamada sabugo, ya que cortarla puede ser doloroso y causar sangrado. Limítate a cortar las partes blancas de la punta.

Después de cortar una uña, es mejor hacer una pausa para evitar que tu gato se estrese demasiado. Ofrécele una golosina o juega con él como recompensa, o déjalo retirarse si prefiere estar solo por un momento.

Repite el proceso en el resto de las patas, espaciando el corte de las uñas a lo largo de varios días y cortando una pata a la vez para evitar que el gato se agobie demasiado.

Los rascadores pueden ayudar a mantener las uñas en buen estado, además de mantener a los felinos lejos de afilar sus uñas con los muebles de la casa.

Si las patas de tu gato se encuentran agrietadas y secas es preferible que contactes a tu veterinario para que te indique la forma más segura de mantenerlas hidratadas.

“Puede que te recomiende que pruebes a hidratarlas con aceite de oliva, de coco o cualquier otro aceite alimentario que no sea perjudicial para él cuando se lama”, menciona la página de Hill´s.

También existen bálsamos especiales para hidratar las almohadillas de las patas; sin embargo, es importante consultar los ingredientes que los componen para asegurarse que pueden utilizarse sin ningún peligro.

También es importante considerar que un gato de interior corre menos riesgos que un gato que explora fuera de casa, pues en casa no se encuentran con superficies muy calientes o muy frías, ni superficies peligrosas o productos químicos expuestos.

“El aire seco del invierno puede resecar las patas de tu gato, así que considera la posibilidad de utilizar un humidificador durante los meses más fríos”, menciona el sitio de Hill´s.

Con todo lo que implica el cuidado de los gatos, es fácil olvidar la atención necesaria para sus patas. Si adoptas el hábito de revisarlas y limpiarlas diariamente, te resultará más sencillo mantenerlas en óptimas condiciones.