Mickey, la cacatúa que puso de cabeza a un centro comercial durante más de un mes

El ave sobrevivió a base de brioche y evadió los intentos de captura en más de 20 ocasiones

El animal escapó en innumerables ocasiones y provocó el caos en un centro comercial de Australia. Crédito: (Facebook/Macarthur Square)

Durante más de un mes, Mickey, una cacatúa de plumaje blanco, se convirtió en el dolor de cabeza de las autoridades al quedar atrapado dentro del centro comercial Macarthur Square, ubicado al suroeste de Sídney, Australia.

Decenas de visitantes vieron al ave en diferentes zonas, siendo el supermercado Coles uno de sus lugares favoritos. Medios como la Australian Broadcasting Corporation (ABC) reportaron que Mickey evadió más de 20 intentos de captura durante el tiempo que estuvo dentro de Macarthur Square.

Sus aventuras llegaron al final el 22 de octubre, cuando Ravi Wasan, experto en vida silvestre de la organización Feathered Friends, atrapó a la cacatúa sin complicaciones. Durante una entrevista con ABC Radio Sydney, el especialista detalló que muchos seguidores en redes sociales estaban seguros de que él podría capturar al ave.

El fin de las aventuras de Mickey

Mickey puso de cabeza un centro comercial al evitar la captura en más de 20 ocasiones (Facebook/Macarthur Square)

“Todos decían: ‘Seguro que puedes atrapar a esa cacatúa”, bromeó Wasan. El experto en vida silvestre afirmó que Mickey siempre se mostraba petrificaba cuando alguien intentaba capturarlo. Su teoría principal era que muchas personas intentaron detener al animal usando redes o canastas, lo que hizo que se asustara mucho.

Ante este comportamiento, Wasan recurrió a una peculiar alternativa: sacó de su santuario a una cacatúa hembra llamada Lady Doris y la llevó hasta el centro comercial. Fue todo un éxito.

“La traje, la puse en el centro comercial y Mickey estaba tan enamorado de que había otra cacatúa cerca. Ella (Lady Doris) me ayudó a atraerlo, para ser honesto”, dijo Wasan.

Tan pronto como captó la atención de Mickey, Wasan le dio un par de golosinas a Lady Doris delante suya, lo que él interpretó como una señal de que todo estaría bien. “Lo vio y dijo: ‘Está bien, este tipo no me va a agarrar’”, bromeó.

Durante semanas la cacatúa fue observada por trabajadores y visitantes del centro comercial.

Después trató de darle un “premio” a Mickey, sin embargo, este no se lo tomó de muy buena manera, pues le soltó un mordisco al experto en vida silvestre.

Como parte de su estrategia y con Mickey comiendo de su mano, Wasan trasladó a Doris hasta una jaula instalada a las afueras del supermercado Coles. La cacatúa macho no dudó ni un segundo en seguir a su amada.

“Mickey siguió a Doris hasta la jaula y yo hice un sprint de último momento y cerré la puerta detrás de él”, contó Wasan, quien admitió que fue la cacatúa hembra la que “hizo la mayor parte del trabajo” durante la captura.

Penny Sharpe, ministra de Medio Ambiente, admitió que la tarea de capturar a la cacatúa que se instaló dentro del supermercado fue un reto y enfatizó que la gente sentía una gran preocupación sobre que se decidiera que lo mejor era “matarla en lugar de capturarla”.

“Parece estar en muy buenas condiciones. Ha estado viviendo a base de brioche (un tipo de pan) y otros bocadillos en Coles”, declaró la ministra de Medio Ambiente.

ABC reportó que la cacatúa fue liberada nuevamente en la naturaleza.

Mickey sobrevivió a base de pan

Miembros de una organización especializada en aves pusieron fin a las aventuras de Mickey. (Facebook/Councillor Josh Cotter Campbelltown City Council)

Durante una entrevista con el periódico británico The Guardian, John Grant, portavoz de la organización de rescate de vida silvestre Wires, dijo que la comida suele ser el principal motivo por el cual las aves entran a un edificio.

Dijo que a las palomas y otras aves “les encantan los patios de comidas”. Explicó también que cuando uno de estos animales pueden entrar en pánico fácilmente y comenzar “a volar por todas partes” cuando ingresan a cualquier habitación.

Detalló que “por lo general”, salen volando por cuenta propia de los lugares, no obstante, en caso de que esto no suceda, Grant recomendó llamar a un grupo local de vida silvestre, ya sea para pedir consejos o ayuda.