Animales negros y supersticiones, la oscura relación que se viraliza en estos días

A lo largo de la historia, los animales de pelaje negro han sido rodeados de mitos y supersticiones que han influido en la percepción pública de estas criaturas. Desde gatos que traen mala suerte hasta cuervos que se asocian con presagios oscuros, la cultura popular ha teñido de misterio a estos animales.

Los mitos que rodean a los animales negros se han difundido mediante cuentos y creencias que la gente ha ido compartiendo a lo largo del tiempo. Estas historias suelen presentar a estos animales de manera negativa o misteriosa, lo que genera una imagen equivocada sobre ellos.

Sin embargo, es crucial desentrañar estas falsas creencias, pues, lamentablemente, muchas de estas criaturas son torturadas y sacrificadas bajo justificativos supersticiosos o rituales, revelando la necesidad de una mayor comprensión y respeto hacia la biodiversidad que representan.

Los gatos negros han sido representados en cuentos infantiles como los compañeros leales de las brujas, una imagen que se ha arraigado en la cultura popular y que ha contribuido a la idea de que traen mala suerte o están vinculados con lo sobrenatural, según la organización Anima naturalis, dedicada a la defensa de los animales en España y Latinoamérica.

Este simbolismo ha llevado a que, especialmente durante el mes de octubre y con la llegada de festividades como Halloween, estos felinos sean buscados para rituales o prácticas que alimentan aún más estas supersticiones.

Por esta razón, muchas organizaciones de protección animal y refugios aconsejan no dar en adopción gatos negros durante octubre. Esta medida busca proteger a estos animales del riesgo de ser utilizados en prácticas rituales, garantizando su bienestar y seguridad hasta que pase el auge de dicha temporada.

Además, el color negro no favorece a los gatos a la hora de ser adoptados, de acuerdo con la fundación Affinity, dedicada a “difundir los beneficios del vínculo entre personas, gatos y perros”

“Los gatos negros y marrones se adoptan menos que los de capa más clara, sean blancos, color point o grises… Y aunque finalmente sean adoptados suelen permanecer más tiempo en el refugio antes de que alguien los elija, incluso cuando son gatitos”, menciona la página.

También conocidas como “ratones viejos”, estas mariposas se han asociado con la muerte y desgracias, lo que se ha materializado en la muerte de muchas de ellas, de acuerdo con National Geographic.

“En las creencias mesoamericanas se le asociaba con la muerte y el mal agüero. En náhuatl sus nombres eran mictlanpapalotl (mariposa del país de los muertos), micpapalotl (mariposa de la muerte), miquipapalotl (mariposa de mala suerte) o tetzahupapalotl (mariposa del espanto)”, menciona el sitio.

En inglés es conocida como black witch (bruja negra) y su nombre científico, Ascalapha odorata, proviene del demonio Ascáfalo, el horticultor de Hades, rey del inframundo en la mitología griega.

Aunque muchos consideran que no es una especie agradable para ver, los zapotecos prehispánicos de Oaxaca admiraron su capacidad de metamorfósis y lo plasmaron en su arte para representar la esencia espiritual eterna al morir, de acuerdo con la Gaceta de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Las gallinas negras se consideran valiosas en rituales curativos y ceremonias de protección, por su supuesta capacidad para absorber y transferir el mal, de acuerdo con el artículo El conocimiento de la gallina (Gallus gallus domesticus) entre los tseltales y tsotsiles de los Altos de Chiapas, México, publicado por la revista Etnobiología de la Asociación Etnobiológica Mexicana.

Estas gallinas, conocidas como ik al alak o i kal mut, se utiliza en rituales vinculados a la maldad, tanto para evitarla como para curar problemas causados por ella, o incluso para practicar brujería. Según entrevistas realizadas en Chamula, se usan para curar enfermedades atribuidas a la hechicería negra, así como para hacer mal.

También son utilizadas para tratar el mal de ojo y en limpias donde se ofrendan para curar enfermedades, pues se cree que absorben el mal de la persona.

Estos animales han sido relacionados con el demonio y se les atribuyen características malignas, de acuerdo con el libro Cabras. Pastoreña de La Mixteca y criolla de Chihuahua, publicado por la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca. Esta asociación proviene de la Edad Media, donde las cabras, particularmente los machos cabríos, eran símbolos de lujuria y fertilidad.

“En Occidente, el color negro representa luto, muerte y oscuridad, por lo que se le asocia con la hechicería; si a esto le añadimos un animal satanizado en la Edad Media, no es de extrañar la identificación del demonio con una cabra negra”, menciona la publicación.

La imagen del mal asociada a un macho cabrío proviene de la influencia cultural traída a América desde España, principalmente a través de la religión católica. Durante la Edad Media, esta religión prohibió la práctica de otras creencias, considerándolas paganas y contrarias a sus enseñanzas. Para representar al demonio de forma gráfica, se recurrió a la figura de la cabra, que simbolizaba lo prohibido y el mal.

En México se asocia al diablo, un ejemplo significativo es la leyenda en la Mixteca oaxaqueña, donde la figura del diablo es conocida como “Catrín” y es descrita con elegantes atuendos negros, pero con sutiles rasgos de cabra.

En esta leyenda, quien realiza un pacto con el diablo recibe un rebaño de chivos negros, simbolizando la riqueza obtenida mediante influencias sobrenaturales, pero a un alto costo: la esclavitud eterna del alma del pactante, que tras su muerte cuida al rebaño del demonio.

En la literatura medieval, el cuervo es una figura con una carga simbólica muy fuerte, a menudo representando la traición, el mal agüero o la muerte, de acuerdo con el artículo El cuervo y su simbología publicado en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.

En la épica medieval, la aparición de un cuervo volando frente a un personaje, especialmente desde el lado izquierdo (considerado de mal augurio), era una señal de que algo malo iba a suceder. El cuervo era visto como portador de malas noticias o símbolo de traición y en fábulas medievales y españolas esta ave aparece como un engañador, astuto y oportunista.

Antes del cristianismo, las culturas paganas europeas ya tenían mitos relacionados con los cuervos. En la mitología griega, por ejemplo, se cuentan historias de héroes transformados en cuervos como castigo por su comportamiento, y se creía que los cuervos tenían la capacidad de comunicar augurios, buenos o malos, lo que reforzó su simbolismo como aves que traían mensajes del destino.