Larry, un perro que había vagado por las calles de Misuri, Estados Unidos, durante más de ocho meses, encontró una importante segunda oportunidad gracias a los miembros de la organización sin fines de lucro local Ozarks Pet Rescue (OPR).
Miembros del grupo informaron a través de su página de Facebook que el escurridizo animal finalmente había sido capturado el domingo 13 de octubre tras varios intentos fallidos.
Y es que el rescate de Larry no fue para nada sencillo, ya que los esfuerzos que los integrantes de OPR tuvieron en el pasado resultaron insuficientes en múltiples ocasiones; las trampas en vivo no funcionaron y tuvieron que recurrir a utilizar un dardo tranquilizador para asegurarlo.
El final de un año de aventuras
Todo fue posible gracias a la ayuda de un miembro del departamento de control animal local y otros diez voluntarios. Tan pronto como Larry fue capturado, el equipo lo trasladó de inmediato a la Clínica Veterinaria Williams, donde pudo recibir un necesario chequeo de salud.
La mezcla de poodle, o caniche, de aproximadamente tres años, pesaba cerca de 10 kilogramos y se descubrió que no estaba infestado con ningún parásito como los gusanos del corazón, sin embargo, fue diagnosticado con una enfermedad transmitida por garrapatas.
Con esta información inició el tan ansiado inicio de Larry en su nueva vida, marcado por un necesario y significativo cambio de imagen. La mascota perdió casi un kilogramo de peso luego de ser trasquilado.
Todo el pelo estaba enmarañado y le cubría los ojos, a pesar de su nuevo aspecto, todavía necesitaba aprender a relacionarse con los humanos y acostumbrarse al tacto de las personas.
“Tiene un hemograma elevado por lo que se le administró un antibiótico de larga duración, fue castrado antes de venir con nosotros, no tiene microchip, las enzimas hepáticas están elevadas, pero pueden estar relacionadas con el estrés o la anestesia”, escribieron los miembros de OPR.
Explicaron que tan pronto como se “descomprimiera”, Larry iniciaría “su viaje” con el equipo de entrenadores de la organización, por lo que pidieron a sus seguidores apoyo monetario.
En un mensaje dirigido a sus seguidores, integrantes de la organización destacaron la importancia de su labor y afirmaron que “este chico es de lo que se trata el rescate, ayudar a aquellos que más lo necesitan”.
En una publicación reciente, compartieron que “no podían creer” la increíble transformación de Larry, quien a pesar de ser un poco tímido “a su manera”, comenzó a confiar cada vez más en los humanos y ahora permite que le acaricien la barriga y le den besos.
Aprender a confiar otra vez
“Este dulce chico es por lo que dejamos fuera todos los comentarios de odio y dudas que tantos tenían en nosotros sin saber la historia de nuestro equipo con el seguimiento y la trampa a lo largo de nuestra vida en la comunidad de rescate”, escribieron en la publicación.
En un post reciente, los miembros de OPR informaron que Larry sigue buscando a sus dueños después de permanecer ocho meses o más deambulando por las calles sin rumbo fijo.
Actualmente se encuentra a salvo y bajo el cuidado constante de especialistas en medicina veterinaria. Está castrado y no cuenta con microchip.
“Si piensas que eres el dueño de este dulce chico, mándanos un mensaje hoy. Requeriremos verificación de que es tu mascota”, detallaron en el post.
Dos fotografías acompañaban la publicación y mostraban cómo el animal de compañía disfruta de su nueva oportunidad de vida tras haber sufrido un cambio radical al deshacerse de casi un kilo de pelaje.