Sumar a un cánidoen la familia es una decisión importante que no puede tomarse a la ligera, cada raza tiene comportamientos, hábitos y necesidades particulares de su especie. Elegir una mascota cuya personalidad no se adapte a tu estilo de vida podría traer algunos problemas en la convivencia diaria.
Para esta importante elección debes de tomar en cuenta el tamaño de la vivienda, si la mascota va a convivir con niños, el tiempo disponible para sus paseos y si es compatible con el estilo que llevas.
Bajo estos motivos te compartimos las características del Fox Terrier de pelo duro, su historia, cuidados básicos y los tamaños promedio cuando alcanzan su edad adulta. Así como algunos consejos que te ayudarán a instruirlo de la mejor manera, según la página web de Purina.
Origen y personalidad del fox terrier de pelo duro
Puede parecer pequeño, pero el Fox Terrier de pelo duro a pesar de tener el lomo corto, es musculoso e irradia fuerza. Su pelaje grueso y duro es predominantemente blanco con negro, fuego o negro con manchas color fuego. Los machos adultos pueden alcanzar los 39 cm de altura y pesan unos 8 kg, las hembras son algo más pequeñas.
Desarrollado a partir de un terrier de trabajo de pelo duro negro y fuego oriundo de Gales, Derbyshire y Durham, el fox terrier de pelo duro se usa desde el siglo XIX para evitar que el zorro se esconda al salir de su madriguera y poder continuar así la caza. En un principio se clasificó como fox terrier con dos variedades (pelo liso y pelo duro) y los cruces entre ambas eran habituales, pero actualmente se consideran razas distintas con estándares propios.
Los beneficios de tener un perro
Una mascota de compañía trae muchos beneficios a la vida de las personas, pues la constante interacción con ellos genera resultados positivos en la salud física, familiar y de la comunidad en la que se desarrolla, de acuerdo con una investigación realizada por Human Animal Bond Research Institute (HABRI), organización a favor de los animales de compañía.
Steven Feldman, director de dicha asociación, explicó en su investigación que los perros o gatos son capaces de "amortiguar el estrés y ayudar a abordar el aislamiento social". Convivir con un compañero peludo influye en gran medida a cuidar los niveles de presión arterial, frecuencia cardíaca y ayuda a la producción de hormonas relacionadas con el bienestar.
La misma organización realizó una encuesta en 2021 para evaluar qué tanto cambió la vida de las personas antes y después de integrar a un perro a su círculo familiar y los resultado impresionaron a los investigadores, pues el 61 por ciento de los propietarios aseguró que consideraría cambiar de casa con tal de que su mascota estuviera cómoda y el 45 por ciento buscaría cambiar de trabajo para compartir más tiempo con el animal.