Los perezosos de dos dedos (Choloepus hoffmanni) son animales únicos que habitan en Centro y Sudamérica en lo profundo de selvas y bosques caducifolios. Llegan a pesar entre cinco y siete kilos y es común verlos colgando entre las ramas de los árboles, pero estas realidad podría acabarse a finales del siglo.
Actualmente son considerados por expertos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) como una especie de menor preocupación, sin embargo, un estudio recientemente publicado en la revista científica PeerJ Life and Environment sugiere que diversos factores podrían limitar la supervivencia de los perezosos.
La investigación titulada “Sloth Metabolism May Make Survival Untenable Under Climate Change Scenarios” (El metabolismo de los perezosos puede hacer insostenible la supervivencia en escenarios de cambio climático) estudió cómo esta especie responde a las variaciones de la temperatura ambiental, su consumo de oxígeno y otros aspectos.
Qué le depara el futuro a los perezosos
Los hallazgos del equipo de científicos traen un futuro poco alentador para el carismático animal considerado como símbolo nacional de Costa Rica. Desde el punto de vista metabólico, estas criaturas, especialmente aquellas que habitan en zonas de mayor altitud, podrían enfrentar una gran lucha contra el cambio climático.
Rebecca Cliffe, investigadora principal, relató en un comunicado de prensa que la especie se ve limitada por su “metabolismo lento” y una “incapacidad única” para autorregular su temperatura corporal de manera eficaz, no así como la gran mayoría de los mamíferos.
“Nuestra investigación muestra que los perezosos, particularmente en regiones de gran altitud, podrían no ser capaces de sobrevivir a los aumentos significativos de temperatura pronosticados para el año 2100″, lamentó Cliffe.
Se espera que estos cambios se traduzcan en aumentos de entre dos y seis grados centígrados dentro de los hábitats comunes de los perezosos, por lo que su poca capacidad para procesar energía, así como el limitado espacio geográfico, podrían ser una combinación letal que acabe por sentenciar el futuro de la especie.
Algo que también preocupa a los expertos y que se suma a la lista de factores que podrían poner en riesgo la supervivencia de los perezosos es que tienen una tasa de digestión hasta 24 veces más lenta que la de otros herbívoros de su tamaño.
“Cualquier aumento en la demanda metabólica debido al cambio climático no puede satisfacerse fácilmente con un mayor consumo de alimentos, lo que dificulta que los perezosos mantengan el equilibrio energético”, aseguraron los especialistas en el comunicado de prensa.
Una especie que podría desaparecer
Aunque todos estos elementos representan una receta para el desastre, el que genera mayor preocupación entre los científicos es la poca o nula capacidad de los perezosos de gran altitud para mudarse a regiones en las que las condiciones medioambientales y el clima sean más favorables. “Estas poblaciones podrían enfrentarse a la extinción si las temperaturas siguen aumentando”.
“Esta inflexibilidad biológica, junto con la mayor demanda metabólica en climas más cálidos, podría empujar a las poblaciones hacia una crisis de supervivencia”, se lee en el documento.
Las especies que tienen una mayor probabilidad de supervivencia, según detallaron los especialistas, son los perezosos que viven en regiones de menor altitud, pues son ellas quienes cuentan con la capacidad de “trasladar sus áreas de distribución” a zonas más altas.
Para mitigar en medida de lo posible el sombrío futuro que podría depararle a los perezosos, los investigadores solicitan que se hagan más investigaciones sobre “estrategias de adaptación y políticas de conservación”.
Con estas últimas se podrá tener un mejor panorama y entender las mejores formas de mantener a la especie con vida, al mismo tiempo que se suavizan “los riesgos que enfrentan los perezosos en un mundo que se calienta rápidamente”.