Explotación y abuso: el oscuro destino de los camellos en lugares turísticos como las pirámides de Giza

Activistas de PETA expusieron las graves condiciones de maltrato y abuso a las que son expuestos estos animales considerados “dóciles y sociales”

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PETA evidenció el abuso al que son sometidos cientos de camellos en un mercado de Egipto. (Instagram/oficialpetalatino)

Activistas de la organización animalista internacional People for the Ethical Treatment of Animals (PETA) denunciaron recientemente las condiciones de abuso, explotación y maltrato animal a las que son sometidos cientos de camellos en mercados y lugares turísticos de Egipto.

Reportaron que en el “célebre” mercado de Birqash, ubicado a unos cuantos minutos de distancia del Cairo, se venden camellos a la industria turística, donde más tarde son utilizados para tomarse fotografías y dar extenuantes paseos.

Comerciantes de este punto de venta no tratan con respeto a los seres sintientes, por el contrario, investigadores de PETA observaron a comerciantes dándoles puñetazos, empujándolos, tirándoles de los labios y orejas y golpeándolos con porras.

Una vida marcada por el maltrato

La mayoría de los camellos
La mayoría de los camellos son víctimas del dolor causado por los apretados amarres. (Captura de pantalla/YouTube/PETA (People for the Ethical Treatment of Animals)

Dicho maltrato y condiciones deplorables no son nuevas, pues activistas de PETA expusieron desde 2019 cómo era la vida de los animales. Lo más grave filtrado por la organización fueron los avistamientos de algunos cadáveres frescos con una enorme cortada en el cuello.

El sufrimiento de estos animales “dóciles y sociales” no acaba aquí, pues una vez son vendidos a la industria turística son hacinados en pequeños camiones. Cuando llegan a su destino después de un tortuoso viaje, soportan el maltrato de sus nuevos dueños, quienes los golpean en el rostro o testículos y atan sus patas para evitar que salgan corriendo.

PETA denunció las condiciones en
PETA denunció las condiciones en las que viven camellos que son utilizados para paseos en las pirámides de Giza.

También se han observado a camellos amordazados o con el hocico encadenado para evitar que escupan o muerdan al ser víctimas del miedo. Según reportes de Africanews, citados por la organización animalista, uno de estos animales tarda en madurar un aproximado de ocho años, sin embargo, se suelen utilizar ejemplares de hasta cuatro años para monta, lo que impacta negativamente en su desarrollo óseo.

Su vida después del mercado se resume en años de explotación en paseos y sesiones fotográficas en lugares como las pirámides de Giza y Saqqara. Cuando sus cuerpos no soportan más, suelen ser devueltos al lugar original de compra donde se venderán nuevamente a los mataderos.

Investigaciones de los miembros de PETA Asia lograron la detención de tres comerciantes de camellos. En aquel entonces, autoridades del estado se comprometieron a mejorar la calidad de vida de estos animales, pero en nuevas visitas, realizadas en 2023 y 2024, descubrieron que las condiciones eran prácticamente las mismas que fueron expuestas en 2019.

Cómo acabar con la explotación animal

Los caballos también son víctimas
Los caballos también son víctimas de maltrato y explotación.

Algunas de las propuestas de los activistas incluyen la sustitución de los camellos para dar paseos por alternativas “más amables”. PETA India propuso en el pasado diseños de carros eléctricos con el objetivo de sustituir a los elefantes en paseos del Fuerte Amer.

Estas opciones le otorgan fuentes de ingreso económico a las personas, al mismo tiempo que se elimina la explotación y maltrato animal.

Decenas de turistas, cuyas identidades permanecieron en el anonimato, también denunciaron el abuso. Sus declaraciones publicadas en sitios de reseñas de viajes fueron recopiladas por PETA y expuestas en un artículo disponible en la página de investigaciones de la organización.

“Camellos heridos, obligados a trabajar sin la hidratación adecuada. No nos impresionó. Les informamos de esto al personal y nos ignoraron”, redactó uno de los viajeros que visitó este sitio turístico.

“No montamos en camellos ni en caballos porque, después de ver cómo los tratan, no queríamos contribuir al maltrato. Los pobres animales son explotados y es desgarrador verlo”, fue otro de los testimonios recopilados por los activistas de PETA.

No pagar por paseos en camello o por tomarte fotografías al lado de animales, así como denunciar en caso de que alguien te solicite participar en actividades que involucren a seres sintientes, son sólo un par de formas con las que personas se pueden sumar a acabar con el maltrato.

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