Crosby y cómo una aventura de senderismo acabó en una operación de salvamento en las montañas

Crosby, un golden retriever de siete años y medio, protagonizó un curioso y tierno episodio la tarde del lunes 16 de septiembre, cuando activó una operación de rescate al mostrar signos de fatiga mientras practicaba senderismo con su dueño en la montaña Old Bridle Path de New Hampshire, Estados Unidos.

Voluntarios del equipo de voluntarios NH Paw Rescue (NHPR) acudieron al auxilio de la mascota de casi 50 kilos de peso, quien necesitó ayuda aproximadamente a 990 metros de altura.

Luego de más de dos horas y de una extenuante caminata cuesta abajo, Crosby pudo reunirse sano y salvo con Huckleberry, su amigo canino de pelaje blanco y regresar a su hogar sin ningún problema.

La travesía del golden retriever comenzó a las 15:30 horas del 16 de septiembre, cuando los miembros de NHPR recibieron una notificación sobre un perro que necesitaba ayuda. Crosby recorría Franconia Ridge Loop, cuando su dueño notó que poco a poco disminuía su velocidad y tomaba descansos cada vez más largos.

Ambos pararon durante unos minutos en la cabaña Greenleaf Hut para descansar. Después de la pausa, el equipo recorrió más de un kilómetro, hasta que la mascota no pudo continuar debido al agotamiento y el daño que sufrió en los tejidos blandos de sus almohadillas, según informaron los rescatistas en una publicación de Facebook.

Aunque el clima no era una preocupación, la falta de luz comenzó a ser un problema, pues el dueño de la mascota agotada no contaba con equipo de iluminación, ni aditamentos necesarios para estar cómodo durante su estancia.

Miembros del NHPR se embarcaron en la misión de ayudar a Crosby. Tras recorrer el Old Bridle Path, el primer socorrista alcanzó a la pareja poco después de las 17:00 horas.

A pesar de que pasaron casi dos horas varados a poco menos de un kilómetro de altura, el perro y su dueño no estuvieron solos, pues recibieron la ayuda de los excursionistas que pasaban por la zona, quienes incluso lograron trasladar a la mascota hasta una altura de aproximadamente 600 metros.

Todo el equipo de rescate alcanzó a Crosby y su dueño a las 18:30 horas. En ese momento se valieron de una camilla rígida e iniciaron la complicada labor de descender al perro de poco menos de 50 kilogramos.

A las 19:15 la operación de rescate llegaba a su fin. Cuando arribaron a los pies de la montaña, Crosby, quien tenía las patas vendadas y protegidas con zapatos para perros, saltó sin pensarlo al interior del vehículo de su dueño.

Una vez en el asiento trasero se reunió con Huckleberry y disfrutó de una larga y merecida siesta de camino a casa. Integrantes del equipo de rescate canino afirmaron en el post de redes sociales que el dueño de Crosby planeaba buscar atención veterinaria para descartar cualquier problema grave de salud que pudiera ser ocasionado por este incidente.

Especialistas del NHPR detallaron que el circuito Franconia Ridge Loop es “una caminata difícil” que se extiende por casi 14 kilómetros y que alcanza una altura aproximada de hasta un kilómetro y medio cuyo terreno es muy rocoso y está expuesto a “los elementos” durante largos tramos.

“Estos factores, combinados con temperaturas de septiembre más cálidas que el promedio, resultaron ser demasiado para un golden retriever grande como Crosby”, escribieron en la publicación.

Los rescatistas recomendaron a las personas que quieren practicar senderismo llevar el equipamiento y suministros adecuados, especialmente ropa protectora, linternas, un mapa, comida y agua adicionales, así como un botiquín de primeros auxilios.

En el caso de las mascotas, los empleados del NHPR recomiendan contar con un arnés de rescate para perros, así como un kit de emergencia para animales de compañía que incluya vendajes y botines para las patas.

“A la mayoría de perros no le gustará tener zapatos, pero pueden permitir que salga a caminar sin sufrir daños”, concluyeron los especialistas.