Sorprendente momento en FOTO: ballena jorobada casi se traga a una foca en pleno tour

El momento fue inmortalizado por Brooke Casanova. El pequeño mamífero marino regresó al agua sano y salvo después del angustiante episodio

Una ballena jorobada fue captada mientras estaba a punto de comerse a una foca. (Brooke Casanova/Blue Kingdom Whale & Wildlife Tour)

Encargados de las redes sociales de Blue Kingdom Whale and Wildlife Tours, una empresa de tours ecológicos con sede en Washington, Estados Unidos, compartieron las imágenes del curioso e impactante momento en el que una gigantesca ballena jorobada (Megaptera novaeangliae) casi traga accidentalmente a una pequeña foca.

Los hechos ocurrieron el jueves 12 de septiembre en el estrecho de Juan de Fuca. Los excursionistas pudieron deleitarse con el impresionante espectáculo de la naturaleza mientras que la ballena identificada como “Zillion” casi incluía a la foca en su dieta principal.

Según reportes de la televisora local King 5, el gigantesco mamífero marino estaba alimentándose cuando pasó todo. Al momento de abrir su boca para llevarse un gran bocado de peces, la foca terminó dentro de sus mandíbulas mientras subía a la superficie.

El angustiante momento

El momento quedó inmortalizado por la fotógrafa Brooke Casanova el jueves 12 de septiembre. (Brooke Casanova/Blue Kingdom Whale & Wildlife Tour)

En la fotografía compartida con Infobae, se observa al animal tratando de escapar de las fauces de Zillion mientras su cara expresa una suerte de preocupación al estar a punto de convertirse en parte de la dieta de la ballena.

La encargada de inmortalizar este curioso momento fue Brooke Casanova, quien se encontraba con los miembros de Blue Kingdom Whale and Wildlife Tours.

Dentro de las fauces de Zillion, cerca de donde se ve una pequeña salpicadura de agua marina, se puede apreciar al animal de color gris mirando fijamente hacia el horizonte al mismo tiempo que la ballena jorobada cierra su enorme mandíbula.

Erin Gless, directora ejecutiva de la Pacific Whale Watch Association (PWWA), explicó durante su entrevista con la televisora local estadounidense que es “muy probable” que la foca también estuviera llevándose un bocado en la misma área que Zillion cuando ocurrió el suceso.

Gless detalló que esto pudo traducirse en un caso de estar en el lugar incorrecto durante el momento menos adecuado. Sin embargo, por muy espectacular y desesperanzadora que pudiera lucir la foca en la fotografía, el pequeño animal salió sano y salvo gracias a Zillion.

Según lo relatado por la directora ejecutiva de la organización a King 5, el animal abrió sus mandíbulas en múltiples ocasiones para dejar salir a la foca en cuanto descubrió que se encontraba ahí, pues la dieta de estos animales está compuesta únicamente de peces pequeños o krill, por lo que tienen gargantas relativamente pequeñas.

Debido al tamaño de sus gargantas, las ballenas no son capaces de tragar algo tan grande como una foca, según consideró Gless.

Una perspectiva diferente

La foca salió ilesa y pudo regresar al mar después del episodio tan angustiante. (Imagen ilustrativa/Wikimedia)

Tomis Filipovic, fotógrafo de Eagle Wing Tours capturó el mismo momento desde una perspectiva diferente y relató su experiencia durante una entrevista con el medio CTV News Vancouver.

El artista comentó que “por suerte” la garganta de Zillion -como de todas las ballenas jorobadas- es “tan ancha como un pomelo”, por lo que no pudo tragar a la foca y “estaba simplemente chapoteando en el agua” tratando de sacarla de la boca.

“La foca terminó derramándose por un costado y quedando libre”, añadió el fotógrafo, quien aseguró que observa ballenas desde hace seis años y que nunca había “visto nada parecido”.

Filipovic relató para Global News Canada que tanto la foca como Zillion estuvieron “completamente bien” después del incidente, pero bromeó al decir que el pequeño animal debería “pensárselo dos veces” cuando hay ballenas jorobadas cerca.

“Esto es algo que nunca hubiera pensado que sucedería, realmente es una captura única en la vida”, añadió Filipovic.

Actualmente las ballenas jorobadas, así como las azules, de Groenlandia, sei, francas del Atlántico Norte y del Pacífico Norte, los rorcuales de aleta y cachalotes se encuentran protegidas bajo la Ley de Especies en Peligro de Extinción de Estados Unidos, de acuerdo con la National Oceanic and Atmospheric Administration (NOAA).