Así son los gatos siberianos, una raza exótica que resuelve el problema de las alergias

Elegir un gato como mascota conlleva una gran responsabilidad, pues como animal de compañía depende completamente de las personas que están a su cargo. Cada especie tiene necesidades específicas por eso es importante tener en cuenta aspectos como su personalidad, comportamientos, tipo de pelaje y tamaño.

Otro factor importante a considerar es la edad, un felino recién nacido precisa de muchos más cuidados que uno adulto y aunque aprenden rápido es importante analizar esta situación porque va a necesitar que inviertas más tiempo para que se adapte a tu estilo de vida.

El proceso de adaptación de un felino a su nuevo hogar es paulatino, generalmente inspeccionan todo el lugar para sentirse lo más cómodo posible. Este tipo de animales de compañía necesita de espacios diferenciados, es decir, que utilizan determinados lugares para alimentarse, descansar y una zona de higiene.

Por estos motivos te compartimos las características y necesidades del Bosque de Siberia que te pueden ayudar al momento de elegirlo como un nuevo compañero de vida.

El gato siberiano es un animal afectuoso y leal que resulta un gran compañero, ya que se lleva realmente bien con todo el mundo, incluidos niños y otras mascotas. Además de su aspecto imponente, le encantan los arrumacos. Tiene una personalidad tan dulce que hace que quieras tenerlo cerca todo el rato.

Durante una entrevista con la Smithsonian Magazine, Leslie Lyons, quien en 2018 estaba a cargo del University of Missouri’s Feline and Comparative Genetics Laboratory, declaró que no existe algo como un “gato hipoalergénico”.

Cuando una persona es alérgica a los gatos, realmente lo es a las proteínas contenidas en su saliva, las cuales llegan hasta su pelaje durante el acicalado diario. La especialista considera que la raza siberiana podría ser la más cercana a ser hipoalergénica.

“La gente notó que determinados gatos siberianos no provocan una respuesta alérgica tan fuerte como otros”, declaró Lyons. Según se reportó en la revista, un estudio conducido en 2017 averiguó que contienen menores niveles de la proteína Fel d 1 que otros gatos, aunque esto podría no ser exclusivo de una sola raza.

Son considerados como el gato nacional de Rusia y su historia se remonta al año 1.000, cuando sus cuidadores -principalmente granjeros y comerciantes- los utilizaban como mascotas controladoras de plagas, de acuerdo con la Cat Fanciers Association (CAF).

Durante la década de 1990, esta raza llegó a Estados Unidos de la mano de la criadora Elizabeth Terrell, fueron aceptados en los registros de la CFA en el 2000 y se llenaron de gloria en 2007, año en el que ganaron un campeonato.

Los gatos como animales mamíferos pasan la mayor parte del tiempo descansando, regularmente duermen entre 12 y 18 horas diarias con periodos intermitentes que pueden durar hasta 113 minutos, de acuerdo con información de Sleep Foundation, organización que se encarga de estudiar los patrones de comportamiento durante el sueño.

Descansar al lado de tu mascota trae grandes beneficios para los seres humanos. La doctora Dana Varble, directora de la Comunidad Veterinaria de Norteamérica, detalló en una entrevista para CNN que dormir a lado de un gato ayuda a estrechar en gran medida la relación dueño-mascota.

El académico de la Universidad de Bristol, John Bradshaw, compartió en una entrevista para National Geographic que los felinos “adoptan” a los humanos como integrantes de su grupo y comúnmente interactúan con ellos como si fuera de la misma especie.

Los gatos externan su cariño levantando la cola y formándose en el cuerpo de sus dueños. Bradshaw detalló que estos animales saben que sus propietarios son más grandes que ellos, pero no adaptan su conducta social cuando interactúan con los humanos.