Decoy, el perro de Shohei Ohtani, se robó el show tras lanzar la primera pelota de un partido de los Dodgers

Shohei Ohtani, el famoso beisbolista de los Dodgers de Los Ángeles, se robó el show la noche del 28 de agosto durante su partido contra los Orioles de Baltimore, sólo que esta vez no fue por su destacada actuación, sino porque su amado perro, Decoy, hizo una aparición pública en el estadio y lanzó la primera pelota del encuentro.

Antes del partido celebrado en el Dodger Stadium, hogar de los Dodgers, se repartieron bobbleheads (muñecos de cabeza gigante y movible) conmemorativos del astro japonés sosteniendo entre sus brazos a Decoy, incluida una versión dorada exclusiva.

La fiebre por la mascota fue tan grande que antes de la apertura del estadio ya había una fila de miles de personas esperando recibir gratis su muñeco conmemorativo de la icónica pareja. El partido contó con la presencia de más de 53.000 aficionados, de acuerdo con datos de la Major League Baseball (MLB).

El emotivo momento en que Decoy llevó la primera pelota del partido a su dueño quedó inmortalizado por una serie de fotografías y videos compartidos a través de las redes sociales de los Dodgers.

En un clip de unos cuantos segundos de duración, se observa cómo la obediente mascota acata todas las órdenes de Ohtani, quien le señala dónde debe pararse. Tras un breve corte, se muestra a Decoy sobre el montículo del lanzador con una pelota entre sus patas.

La misión del perro era de suma importancia, pues lanzar la primera pelota del partido suele ser un honor conferido a pocas personas, sin embargo, la cumplió sin problemas.

Con el esférico entre su hocico, Decoy corrió desde el montículo hasta donde se encontraba Ohtani, quien lo recibió con una enorme sonrisa.

Luego de un par de caricias, el beisbolista alzó su mano “pidiéndole los cinco” al cachorro, quien felizmente se levantó sobre sus dos patas traseras y levantó las delanteras para chocarlas con su dueño, quien lo felicitó dándole una golosina ante el aplauso de la multitud.

Miles de espectadores no ocultaron la fiebre por Ohtani y Decoy, pues, según informó la MLB en un artículo reciente, hubo tanta gente afuera del estadio esperando recibir su bobblehead que el manager Dave Roberts tuvo problemas para entrar al parque.

Roberts bromeó al decir que se sintió feliz de lograr entrar al estadio y declaró que la experiencia fue algo “increíble”.

“No sé si fue Shohei, Decoy o una combinación de ambos, pero hay una gran demanda por este condenado bobblehead. Me tomó una eternidad entrar al Dodger Stadium”, afirmó Roberts.

Señaló que había “una fila larguísima”, por lo que instó a las personas que querían ver el partido a salir lo más pronto posible.

Will Ireton, intérprete del astro japonés, admitió haberse sorprendido con la cantidad de asistentes cuando llegó al parque en compañía de su familia.

“Realmente no estaba consciente de la situación. Pensé que se trataba de otro evento especial”, dijo Ireton.

Ohtani cerró la noche con broche de oro al conectar un jonrón durante la noche que los Dodgers se coronaron vencedores con un marcador de seis carreras a cuatro.

Desde que Decoy hizo su primera aparición oficial, se ganó los corazones de miles de personas alrededor del mundo. Su dueño alimenta la fiebre por su mascota compartiendo fotografías del icónico cachorro.

Recientemente participó en el Players Weekend, un evento durante el que visitan organizaciones benéficas al mismo tiempo que conectan con los fans, y asistió luciendo un par de tenis personalizados con el rostro de Decoy pintado a mano.

Este detalle no paso desapercibido, pues diversas imágenes fueron compartidas a través de las redes sociales de los Dodgers, donde miles de seguidores mostraron su pasión.