Ruth Dalton era una paseadora de perros de 80 años, amada y conocida por toda su comunidad, en la ciudad de Seattle, Washington, Estados Unidos. Su amor por las mascotas fue claro hasta que exhaló su último aliento la mañana del 20 de agosto, cuando un hombre, identificado como Ahmed K. Haynes, la atropelló antes de apuñalar hasta la muerte a uno de sus cachorros.
El delincuente robó el auto de la paseadora en los alrededores de la intersección de Martin Luther King Junior Way East y East Harrison Street, a cuatro kilómetros y medio del centro de Seattle, de acuerdo con reportes del periódico estadounidense The New York Post.
Eric Barden, subdirector del Seattle Police Department (SPD), declaró que Haynes abordó el auto de Dalton desde el lado del pasajero y trató de lanzarla a la calle, mientras por lo menos dos de los perros que paseaba se encontraban dentro del vehículo.
La paseadora murió protegiendo a los perros
Durante el forcejeo por el automóvil, Dalton fue arrastrada fuera del auto. El delincuente se desvió de la carretera y se estampó contra una jardinera. En ese momento, vecinos trataron de ayudar a la octogenaria, uno de ellos tomó un bate para enfrentarse a Haynes, quien portaba un cuchillo, de acuerdo con el subdirector del SPD.
El criminal avanzó en reversa, chocó contra dos vehículos y atropelló a Dalton. Reportes de USA Today indican que los oficiales de los servicios de emergencia acudieron a la llamada de auxilio. Cuando llegaron encontraron a los vecinos tratando de ayudar a la octogenaria.
Bomberos de Seattle intentaron salvar a la mujer, sin embargo, murió en el lugar. Haynes huyó de la escena del crimen.
Laura Dynan, testigo de los hechos, declaró para el medio local Seattle Times que el delincuente no tenía necesidad de avanzar en reversa y que Dalton murió defendiendo a los perros que le fueron confiados para un paseo.
“Esta mujer luchaba por los perros de otras personas y por su mascota en ese auto. Como si no fuera por el vehículo, sino por los animales”, declaró Dynan.
Allison Enell, clienta de Dalton, declaró para USA Today que dentro del automóvil habían seis perros: Prince y otros cinco más, entre los que se encontraba Maisie, un king charles cavalier, que resultó herido y fue trasladado a una clínica veterinaria para una cirugía de emergencia.
Enell señaló que Dalton salvó a sus perros: “Lo hizo a costa de su vida. No tengo dudas de que el agresor habría asesinado a nuestras mascotas si ella no hubiera luchado para abrir la puerta. Pudo haber entregado el auto e irse, pero luchó y luchó. Es una heroína. Estamos destrozados”.
Cargos por homicidio y crueldad animal
Horas después del homicidio de Dalton, la policía recibió información de que alguien hirió a un perro en un parque ubicado a aproximadamente 8 kilómetros de la escena del crimen donde murió la octogenaria.
Barden, según reportes de The New York Post, indicó que enviaron a un oficial de control de animales, quien encontró a un cachorro “apuñalado hasta la muerte”, más tarde la familia de Dalton lo identificó como su querido cachorro Prince.
Haynes fue arrestado por investigación de homicidio y crueldad animal. Tanto el crimen cometido contra el perro, como el asesinato de Dalton, fueron conectados gracias a que los oficiales encontraron una huella digital en el teléfono celular de la paseadora de perros.
El delincuente fue ingresado a la cárcel del condado de King y acusado de asesinato en primer grado, agresión en segundo grado y crueldad animal en primer grado, todos con agravante de arma letal y permanecerá recluido sin derecho a fianza hasta su comparecencia a inicios de septiembre, de acuerdo con reportes de la televisora local KOMO News.