Ruby, una perra de pelaje negro, fue un activo canino condecorado de la Rhode Island State Police (RISP), Estados Unidos, famosa por sus grandes habilidades de rastreo y detección, sin embargo, su vida no siempre fue así de gloriosa, pues tuvo que superar muchísimos obstáculos antes de ganarse su placa.
Sus primeros 8 meses de vida los pasó en un refugio de la ciudad de East Providence tras ser entregada por ser considerada “inmanejable”. Patricia Inman, voluntaria de Rhode Island SPCA, sabía que escondía cierto potencial, por lo que dedicó a una sola cosa: encontrarle un hogar digno a Ruby, quien fue adoptada en más de una ocasión, pero su carácter hacía que todas sus familias la devolvieran.
“Ella era adoptada y devuelta, una y otra vez. Generalmente bajo el mismo argumento de que era ‘inmanejable’”, declaró Joe Warzycha, trabajador del refugio que acogió a Ruby durante varios meses, en entrevista con la organización American Humane (AH), que más tarde reconocería su trayectoria.
Todo gracias a una segunda oportunidad
Era evidente que la energía y forma de ser de la perra no encajaba con cualquier familia y que necesitaba de un “trabajo” en el cual enfocarse. En ese momento conoció a Daniel O’Neil, oficial de policía que más tarde se convertiría en su manejador.
“Tuvo que empezar desde cero. Tuvimos que construir una base con ella” declaró O’Neil. Típicamente, los perros utilizados para búsqueda y rescate son criados y entrenados específicamente para cumplir dicho propósito, por lo que Ruby cargaba “con el estigma de que es la perrita del refugio”.
Gracias a su increíble trabajo y destacada labor a lo largo del entrenamiento, sorteó múltiples obstáculos, completó su formación y se “graduó” con honores, siendo “la primera de su clase”.
Era claro que estaba hecha para el trabajo, durante un par de años se desempeñó como un destacado activo canino del RISP. Un día, sus habilidades fueron puestas a prueba gracias a un inesperado giro del destino, cuando tuvo que ser desplegada para encontrar al hijo de Inman.
“Me levanté temprano una mañana, abrí la puerta del dormitorio de mi hijo y él no estaba”, recordó la mujer que luchó por encontrarle a Ruby un hogar.
Para ese momento, el joven llevaba 36 horas desaparecido. O’Neil y su compañera canina buscaron incansablemente a lo largo de algunos senderos, hasta que en un momento, el animal pareció detectar algo, dio la vuelta y “se esfumó”.
Tras una breve búsqueda, el oficial de policía encontró a Ruby lamiendo la cara del hijo de Inman y se apresuró a dar aviso a la central y a la madre del niño desaparecido.
“No fue nada menos que un milagro, quiero decir, aquí está, un perro al que casi no le quedaba esperanza. Una mujer vio lo bueno en ella y (Ruby) le pagó ‘cien veces’”, añadió Warzycha.
Aunque Inman no había visto a Ruby en más de 7 años, la perra corrió de inmediato hacia ella al reconocerla. “Fue como si nunca se hubieran separado”, dijo O’Neil, quien aseguró que hay que darle una “segunda oportunidad” a los perros de refugio, pues ellos podrían “cambiar al mundo”.
Una historia que llegó a la gran pantalla
Esta y otras acciones hicieron que AH nominara en 2018 a Ruby al Hero Dog Award, premio anual que conmemora las proezas caninas de todo EEUU en diferentes categorías.
Aunque no ganó, su historia de superación conmovió a miles de personas, incluso sirvió de inspiración para la creación de una película titulada “Rescued by Ruby” (Rescatado por Ruby), protagonizada por Grant Gustin y que retrata el vínculo con su manejador y todos los obstáculos que superó antes de convertirse en un condecorado activo canino.
En 2022 y tras el estreno de la película, ella y su manejador, O’Neil, recibieron un homenaje en Fenway Park, estadio hogar de los Red Socks, equipo de la Major League Baseball (MLB).
“Ella continuó trabajando diariamente como mi compañera canina de la Policía Estatal hasta el día en que se ‘graduó’ al paraíso de los perros a los 11 años y medio”, declaró O’Neil durante una entrevista reciente con el medio Fox News Digital.