Una casa ubicada en la cuadra 1600 de Rushmore Drive de Colorado Springs, Colorado, Estados Unidos, se vio envuelta en llamas durante un incendio a las 4:43 horas del 26 de junio. ¿El causante?, un perro.
Oficiales del Colorado Springs Fire Department (CSFD) atendieron el llamado de una familia que reportó que habían sufrido un incendio en la estufa del hogar y que no pudo ser extinguido por los propietarios.
Al ver las imágenes de una cámara de videovigilancia ubicada frente a la estufa, los dueños notaron que quien encendió el aparato en mitad de la noche y que provocó el voraz incendio fue nada menos que su mascota, un perro que curioseaba y olfateó las cajas de alimento sobre la estufa.
La travesura que acabó en incendio
El video de vigilancia fue compartido a través de redes sociales por el departamento de bomberos. Al inicio del clip de 45 segundos se observa cómo la mascota ubica una de las cajas de comida sobre la estufa, se para sobre sus dos patas traseras y comienza a olfatear de cerca.
Al bajarse de la estufa, giró una de las perillas, encendiendo la parrilla de enfrente. El video muestra durante algunos segundos cómo el radiador cambia de color a uno más brillante para después enseñar las imágenes de las llamas voraces que cubrieron una habitación del hogar.
A la escena, según lo informado por los oficiales del CSFD en Facebook, llegó el motor 23 del departamento a “una casa residencial sin fuego ni humo visibles”. El equipo no encontró ningún incendio activo, sin embargo, hallaron señales claras de que hubo llamas en algún momento.
El dueño de la casa logró apagar el incendio por cuenta propia antes de la llegada de los servicios de emergencia, pero tuvo que ser trasladado a un hospital cercano por inhalación de humo.
Encargados de las redes sociales del CSFD informaron que no se reportaron otras lesiones a personas o mascotas.
“Después de hablar con los propietarios y revisar las imágenes de seguridad de su hogar, determinamos que su cachorro sintió un poco de curiosidad y encendió accidentalmente el horno que tenía unas cajas encima”, se lee en la publicación.
Los dueños se despertaron gracias a una función integrada en su dispositivo de videovigilancia que, según el servicio de emergencias, envió un aviso de “temperatura alta” a su teléfono inteligente.
“Este es un buen recordatorio para tener siempre detectores de humo funcionando dentro y fuera de cada área para dormir y en cada piso de la casa, asegurarse de que todos los materiales combustibles estén lejos de la estufa o el horno y conocer dos formas de salir de cada habitación de su casa en caso de incendio”, añadieron los oficiales en la publicación de Facebook.
No es la primera vez y podría no ser la última
Ashley Franco, oficial de información pública del CSFD, contó en entrevista para Newsweek que esta situación “es mucho más común de lo que la gente cree”, pues han tenido casos en los que la gente les asegura que sus perros o gatos saltaron y encendieron la estufa.
“Los diales se golpean con facilidad, por eso siempre pedimos a las personas que tengan mucho cuidado con eso”, explicó Franco, quien solicitó a la población mantener a mascotas y niños fuera de la cocina cuando no hay nadie que pueda supervisarlos.
Franco recomendó a las personas mantener combustibles alejados de sus estufas u hornos, mencionó que algunos de estos aparatos cuentan con seguros para niños y recomendó aquellas que tienen sus diales en la parte posterior.