Frodo, el gato que le robó los reflectores a Lupita Nyong’o en ‘Un lugar en silencio: día uno’

Fue gracias a este personaje, interpretado por Schnitzel y Nico, que la actriz keniano mexicana superó su miedo a los gatos y encontró un fiel amigo en Yoyo, su felino atigrado naranja

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Schnitzel ha acudido a entrevistas, presentaciones y alfombras rojas de la película en la que actúa. (Instagram/schhhhnitzel)
Schnitzel ha acudido a entrevistas, presentaciones y alfombras rojas de la película en la que actúa. (Instagram/schhhhnitzel)

A Quiet Place: Day One (Un lugar en silencio: Día uno en Hispanoamérica y Un lugar tranquilo: Día uno en España), película dirigida por Michael Sarnoski y tercera entrega de la saga de A Quiet Place, está próxima a estrenarse. Entre el elenco se encuentran celebridades como Lupita Nyong’o y Joseph Quinn, sin embargo, un personaje de cuatro patas llamado Frodo se está ganando el corazón de miles.

Frodo es un gato que Sam, interpretada por Nyong’o, lleva consigo a lo largo de toda la película a través de lo que queda de Nueva York, Estados Unidos. Fue traído a la vida por dos felinos: Schnitzel y Nico, según contó Sarnoski en entrevista con el medio IndieWire.

La fama de Schnitzel no se limitó a la gran pantalla, pues también incursionó en el mundo de las redes sociales, específicamente en Instagram, donde cuenta con un perfil exclusivo a través del que se comparten fotografías y videos que son testigo de sus aventuras diarias.

Los felinos que se apoderaron del cine

Schnitzel y Nico fueron elegidos entre una docena de gatos para interpretar a Frodo.
Schnitzel y Nico fueron elegidos entre una docena de gatos para interpretar a Frodo.

Sarnoski relató que “al principio”, la gente supuso que al ser una “gran película”, Frodo sería creado mediante CGI, pues, en sus palabras, “haría que todo sea mucho más fácil”; no obstante, el director tenía otros planes.

“Para mí era importante tener a un gato real con el que pudieras sentirte conectado”, admitió Sarnoski. La producción contrató una empresa de adiestramiento de animales londinense, cuyos profesionales les presentaron a “muchos felinos diferentes”.

“Sólo teníamos un par de días en los que nos sentábamos en la oficina y traían una docena de gatos. Los conocimos y tuvimos una idea de su personalidad, y Schnitzel y Nico fueron opciones claras de ‘gracias a Dios, tienen una especie de alma detrás de sus ojos’”, dijo el director.

La dinámica de trabajo en el set de grabación, según contó Sarnoski al medio, consistió en “sentarse tranquilamente y no irritar a los gatos”. Los actores de carne y hueso, Nyong’o y Quinn, se relacionaron con Schnitzel y Nico para ayudarlos a sentirse seguros mientras eran sostenidos.

Shcnitzel y Nico le ayudaron a Nyong'o a superar su miedo a los gatos. (Instagram/lupitanyongo)
Shcnitzel y Nico le ayudaron a Nyong'o a superar su miedo a los gatos. (Instagram/lupitanyongo)

“Al correr por la ciudad, un gato realmente podía empezar a asustarse, pero realmente llegaron a confiar en esos actores”, subrayó Sarnoski.

En su cuenta de Instagram (Schnitzel the acting cat) se comparten imágenes sobre su vida diaria, una de las fotografías más recientes muestra a él y Nico pasando el tiempo sobre una cama.

Algunas de las aventuras de Schnitzel ocurrieron a lo largo de múltiples alfombras rojas, presentaciones, entrevistas y convivencias con sus compañeros actores humanos; en una de ellas se observan a él y a Nico sentados sobre una silla con un promocional de A Quiet Place: Day One de fondo.

Frodo, el catalizador de una nueva amistad

Schnitzel y Nico le dieron vida a Frodo en la película próxima a estrenarse. (Instagram/schhhhnitzel)
Schnitzel y Nico le dieron vida a Frodo en la película próxima a estrenarse. (Instagram/schhhhnitzel)

Durante la entrevista, el director admitió que relacionarse con los intérpretes de Frodo “fue algo grande para Lupita (Nyong’o)”, ya que cuando empezó el rodaje de la película, la actriz se sentía “aterrorizada por los felinos”, a tal grado que “ni siquiera quería tocarlos”.

Nyong’o contó en diálogo con la revista Glamour que se sometió a “una terapia con gatos” para superar sus miedos antes del rodaje. Gracias a esta estrategia, logró convivir con Schnitzel y Nico.

Logró sentirse tan cómoda con los actores de cuatro patas que llegó al punto de adoptar a su propio gato. Una de sus amigas la llevó al refugio animal de Los Ángeles Best Friends Animal Society, donde vio un cartel al que tomó como una señal.

Yoyo se convirtió en un apoyo inigualable para Nyong'o. (Instagram/lupitanyongo)
Yoyo se convirtió en un apoyo inigualable para Nyong'o. (Instagram/lupitanyongo)

“(El cartel) decía algo como: ‘¿No superas a tu ex? Adopta un gato’. Fue acertado”, admitió Nyong’o. Fue así como Yoyo, un felino atigrado naranja, llegó a su vida.

“Este gato no irá a ninguna parte. Supongo que la mejor anécdota para cuando te sientes mal atendido es cuidar algo. Cuidé a Yoyo y él abrió mi corazón”, dijo la actriz.

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