“Tus huellas permanecerán grabadas en nuestras almas”; Así fue la vida de Beethoven, el famoso perrito del volcán San Salvador

La vida de un perrito está marcada por aquellos momentos en los que puede jugar, disfrutar de la compañía de sus cuidadores y sentir el amor de quienes lo rodean, le dan mimos y lo cuidan. Para Beethoven, un perro San Bernardo de color blanco con café, los 12 años que vivió se sintieron llenos de alegría y amor de cientos y cientos de personas que convivieron, jugaron y hasta les celebraron cada uno de sus cumpleaños.

Sin embargo, hace unos días el restaurante jardín Linda Vista Garden, lugar donde vivía el San Bernardo, dio a conocer la lamentable noticia de su fallecimiento. Aunque no detallaron cuál pudo ser la causa, Beethoven ya era un perro de la tercera edad, por lo que es probable que su deceso se deba a causas naturales del envejecimiento.

En sus años de vida, Beethoven también disfrutó el agradable clima en las alturas y hermosas vistas de uno de los lugares más populares del volcán de San Salvador, en El Salvador. La mascota del lugar solía pasearse por todas las instalaciones, disfrutando el aire limpio, la convivencia con comensales de todas las edades e incluso otros perritos que llevaron al lugar para que jugaran juntos.

Beethoven era un perro muy dócil y jugueton que día con día se dispuso a tener una vida tranquila y llena de amor. En redes sociales, el restaurante compartió muchos de los momentos en los que los asistentes llegaron al lugar solo para ver al perrito. El San Bernardo fue nombrado así en referencia a la película de homónima de 1992 en la que aparece un perro muy parecido. El restaurante incluso celebró sus cumpleaños invitando a otros perritos y disfrazándose de diversas temáticas para que Beethoven siempre sintiera el amor que le profesaban.

Después de los años, y aunque al parecer no había signos de algún padecimiento, Beethoven falleció a sus 12 años el 24 de mayo de 2024. La cuenta de Linda Vista Garden dio a conocer la noticia y compartió un mensaje que conmovió a los visitantes del lugar. “Con profundo dolor despedimos a nuestro querido Beethoven. Su amor y lealtad llenaron de alegría nuestros jardines, tus huellas permanecen grabadas en nuestras almas y tu corazón siempre formará parte de nuestros jardines”.

Muchos turistas no resistían la tentación de fotografiarse junto a la enorme y afable mascota. Tras darse a conocer la noticia, la caja de comentarios de la cuenta de Instagram de Linda Vista Garden se llenó de mensajes emotivos y palabras de consuelo. Usuarios de redes sociales expresaron su tristeza y compartieron sus recuerdos con Beethoven. Entre los comentarios destacaban frases como: “Gracias por hacer sonreír a mis hijos, nos quedan gratos recuerdos con él”, y “¡Misión cumplida Beethoven! ¡Hiciste feliz a cuánto te conoció!”

En el lugar aún permanecen otros cinco perros: tres adultos y dos jóvenes, quienes continúan recibiendo el cariño y cuidados de los empleados del establecimiento.

Los perros San Bernardo son conocidos por su gran tamaño y fortaleza física. Los machos de esta raza pueden medir entre 70 y 75 cm de altura y pesar entre 63 y 81 kg, mientras que las hembras suelen medir entre 65 y 70 cm y pesar entre 54 y 63 kg. Esta raza de perros pueden tener pelo largo o corto, y sus colores varían entre rojo y blanco, café y blanco, así como atigrado y blanco. Algunos de estos perros presentan máscaras oscuras sobre los ojos. Sus orejas son caídas y están situadas en una posición alta en la cabeza, los ojos son oscuros y ligeramente entrecerrados, y la frente presenta bastantes pliegues. Además, tienen belfos, lo que los hace propensos a babear.

Estos perros gigantes encantadores necesitan más tiempo que otras razas para alcanzar su tamaño completo, generalmente alrededor de dos a tres años. De acuerdo con un artículo de Hills Pet, su personalidad es cariñosa y plácida, contrarrestando el miedo que su tamaño puede provocar inicialmente. Sin embargo, son protectores y rápidos para defender a su familia si sienten que están en peligro.

El carácter simpático y tolerante de los San Bernardos los hace ideales para convivir con familias y niños bien educados. “Los San Bernardo son conocidos por su comprensión y paciencia excepcionales”, han destacado diversas fuentes, lo que les permite interactuar de manera cuidadosa con los más pequeños. La convivencia con un San Bernardo requiere dedicación, especialmente en cuanto a su adiestramiento temprano, necesario debido a su tamaño. Aunque tienen fama de obstinados, suelen ser receptivos una vez que entienden las expectativas.

Esta raza muda de pelo dos veces al año, en primavera y otoño, y requiere un cepillado regular. Además, aunque necesitan una alimentación adecuada para mantener un peso saludable, deben evitarse los excesos para no agravar posibles problemas articulares.

Finalmente, los San Bernardos tienen una expectativa de vida relativamente corta de entre ocho y diez años, como ocurre con otras razas de gran tamaño, lo que supone un desafío adicional para sus propietarios.