Paleontólogos identificaron que ciertos dinosaurios emplumados, como los Psittacosaurus, tenían piel escamosa similar a la de los reptiles actuales, revelando nueva información sobre la transición evolutiva de una estructura celular a otra.
Los resultados publicados en Nature Communications se centra en un espécimen específico de dinosaurio emplumado descubierto en estratos que datan de un periodo crítico para comprender cómo estos animales comenzaron su evolución hacia las aves modernas.
Según los investigadores, el espécimen muestra tanto plumas como escamas, indicando una fase intermedia en la evolución de estos animales. Los nuevos datos subrayan la importancia de los fósiles en la comprensión de la historia evolutiva de los dinosaurios y su proceso de adaptación a lo largo de millones de años y proporciona un nuevo entendimiento sobre las etapas intermedias que dieron lugar a la fauna que conocemos ahora.
Un dinosaurio con plumas y escamas
El estudio cuyos resultados fueron publicados en Nature Communications estuvo a cargo de los paleontólogos Zixiao Yang y Maria McNamara, ambos de la Facultad de Ciencias Biológicas, Terrestres y Ambientales de la University College Cork (UCC) de Irlanda, de acuerdo con información de la agencia de noticias Europa Press (EP).
Trabajaron en conjunto con un equipo de científicos de la Universidad de Nanjing de China. Para llegar a tal descubrimiento, los investigadores utilizaron luz ultravioleta para identificar parches de piel preservada invisibles a simple vista de Psittacosaurus, un dinosaurio que vivió a mediados del Cretácico temprano, época en la que estos animales se encontraban en proceso de evolución para convertirse en aves, según EP.
Llevaron a cabo una investigación más exhaustiva al recurrir a rayos X y luz infrarroja. Con esta técnica descubrieron más detalles sobre la estructura celular preservada.
A través de un comunicado emitido por el departamento de prensa de la UCC, Yang declaró que el fósil “realmente es una joya escondida”, pues la piel no es visible a simple vista y “permaneció oculta” cuando el espécimen fue donado a la Universidad de Nanjing en 2021.
“Sólo bajo luz ultravioleta es visible la piel, con un llamativo brillo amarillo anaranjado. Lo realmente sorprendente es la química de la estructura celular. Está compuesto de sílice al igual que el vidrio”, señaló Yang.
Destacó que ese tipo de preservación jamás se había encontrado en fósiles vertebrados y dijo que “potencialmente” hay más vestigios con “tejidos blandos ocultos” que esperan ser descubiertos.
McNamara por otro lado señaló que el descubrimiento podría arrojar luz sobre el proceso evolutivo de las plumas de los dinosaurios.
Luz nueva sobre un interesante proceso evolutivo
La transformación de las plumas a partir de escamas de reptiles es uno de los eventos “más profundos pero poco comprendidos” de la evolución de los vertebrados, esto se debe a que los fósiles de piel “son mucho más raros”, según la investigadora.
“Nuestro descubrimiento sugiere que la piel suave, parecida a la de un pájaro, inicialmente se desarrolló solo en las regiones emplumadas del cuerpo”, dijo la paleontóloga.
McNamara detalló que el resto de la piel “todavía era escamosa” igual que la de los reptiles modernos e indicó que tal “desarrollo zonificado” pudo mantener funciones esenciales como proteger al animal contra la abrasión, deshidratación y los parásitos.
“Por lo tanto, el primer dinosaurio que experimentó con plumas podría sobrevivir y transmitir los genes de las plumas a su descendencia”, agregó McNamara.
El descubrimiento de que algunos dinosaurios emplumados tenían piel escamosa, igual que los reptiles actuales, arroja luz nueva sobre el conocimiento que se tenía sobre los estos animales y la transición evolutiva de un tipo de estructura celular a otra.
Con información de Europa Press (EP)