Tiburón duende: el sobreviviente de las profundidades con una letal y aterradora mandíbula

Los dientes puntiagudos que recubren su mandíbula sirven para empalar a sus presas, a diferencia de los de otras especies de tiburones que los emplean para cortar

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Uno de los aspectos característicos del tiburón duende es su mandíbula, la cual puede extenderse para capturar a sus presas. (Wikicommons/Dianne Bray/Museum Victoria)
Uno de los aspectos característicos del tiburón duende es su mandíbula, la cual puede extenderse para capturar a sus presas. (Wikicommons/Dianne Bray/Museum Victoria)

Una mandíbula dotada de afilados y desalineados dientes, capaz de extenderse más allá del cráneo es la principal característica del tiburón duende (Mitsukurina owstoni) un animal que parece salido de un cuento de ciencia ficción.

Rara vez se avistan a estos especímenes y la mayoría del conocimiento que se tiene sobre la especie es gracias a individuos que caen víctimas de la pesca incidental.

Aunque suelen quedar atrapados en las redes de arrastre de pesca de profundidad, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) los considera como una especie de menor preocupación.

Una mandíbula de pesadilla

Uno de los aspectos característicos del tiburón duende es su mandíbula, la cual puede extenderse para capturar a sus presas. (Wikicommons/Dominio público)
Uno de los aspectos característicos del tiburón duende es su mandíbula, la cual puede extenderse para capturar a sus presas. (Wikicommons/Dominio público)

El tiburón duende habita en aguas de al menos 1.300 metros de profundidad, según información disponible en el sitio web de Oceana, organización internacional dedicada a la conservación de los océanos.

Dicha especie se acerca a la superficie durante la noche y pasan la mayor parte de su vida en la oscuridad. Una de sus características principales es su aspecto intimidante y su largo hocico denominado “tribuna”.

La tribuna está cubierta de órganos especiales que ayudan al animal a localizar a sus presas en ambientes con poca luz mediante la detección del campo eléctrico creado por otros peces. Es una de las pocas especies de tiburones cuyos afilados dientes de aspecto desalineado son visibles aunque tenga la boca completamente cerrada.

Son animales raros de ver y la mayor parte del conocimiento científico sobre la especie se debe a la captura incidental. La institución los considera depredadores activos que cazan a sus presas (calamares y crustáceos pelágicos) extendiendo sus mandíbulas lejos de sus bocas.

Cuentan con una “mandíbula protusible” que es capaz de salir y regresar a su cráneo una vez capturaron a sus presas, según la revista National Geographic.

Esta especie ha sido vista principalmente en costas de países como Tanzania y Sudáfrica, aunque se tienen registros de que habitan cerca de Australia.

Mark McGrouther, director de la colección de peces del Australian Museum, comentó en un video de la institución que el tiburón duende no tiene músculos fuertes y que están dotados de un color rosado grisáceo.

“Cuando detecta electricidad de lo que podría ser un crustáceo, un pez o cualquiera que sea su presa, baja la mandíbula inferior y luego todo el mecanismo se dispara hacia adelante, empalando así a su objetivo”, indicó McGrouther.

Los dientes del tiburón duende están diseñados para empalar a sus presas y no para cortarlas, a diferencia de otras especies de escuálidos, según informó el especialista.

Debido a la distribución y funcionamiento de sus dientes puntiagudos, estos tiburones “generalmente” tienden a tragar completas a sus presas.

Se aparean mediante fertilización interna y dan a luz a pocas crías de tamaño relativamente grande y una vez fuera de sus madres, los tiburones jóvenes están listos para depredar activamente, según especialistas de Oceana.

Una especie que se salva de la extinción

Se alimentan de peces medianos, calamares y crustáceos, principalmente. (Wikicommons/Dianne Bray/Museum Victoria)
Se alimentan de peces medianos, calamares y crustáceos, principalmente. (Wikicommons/Dianne Bray/Museum Victoria)

La UICN considera a este animal como una especie de menor preocupación, debido a que rara vez son víctimas de captura incidental, aunque aquellos que caen en redes de arrastre o de deriva tienden a ser ejemplares juveniles, lo que le da a entender a especialistas de la institución que la mayor parte de población adulta no está dentro del rango de profundidad en el que suelen buscar la mayoría de las pesquerías.

La mayoría de las capturas han sucedido en Japón. En el pasado, un grupo de más de 100 individuos fue atrapado accidentalmente frente a la costa noroeste de Taiwán, a aproximadamente 600 metros de profundidad tras un terremoto, según indicó la institución.

Aunque no se tiene registro de que la carne de tiburón duende sea comercializada, especialistas de la UICN señalan que sus mandíbulas son “muy buscadas” por algunos coleccionistas.

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