La odisea de Matt: cómo un perro sin hogar cambió su destino después de una espera de 676 días

La mascota se reunió con Kenai, su hermano, y uno de los 14 huskys con los que llegó al refugio en 2022

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Matt pasó más de 600 días en un refugio antes de encontrar su nuevo hogar. (Facebook/Lewis and Clark Humane Society)
Matt pasó más de 600 días en un refugio antes de encontrar su nuevo hogar. (Facebook/Lewis and Clark Humane Society)

Matt es un husky que durante 676 días esperó encontrar el hogar perfecto en el que pudiera pasar el resto de su vida. A pesar de que a primera vista luce como una mascota tranquila y amable, las familias que acudían a la Lewis and Clark Humane Society (LCHS), organización sin fines de lucro que brinda refugio a animales callejeros y no deseados basada en Montana, Estados Unidos, siempre pasaron de largo.

El animal se convirtió en un veterano del refugio, por lo que los días pasaban sin que existieran esperanzas de que encontrara un hogar, pero de sorpresa, durante el día 676 de su estadía en el refugio de la organización benéfica, un hombre llegó y tomó la decisión de llevárselo a casa, donde pasaría el resto de sus días junto a Kenai, su hermano, quien fue adoptado por su “padre” hace poco más de un año.

La historia de esperanza de Matt le demostraron a cientos de internautas el valor de la paciencia y las recompensas que se pueden encontrar al final del camino si se espera lo suficiente, pues en su nuevo hogar podrá gozar de una vida digna, colmada del cariño y atención que siempre mereció al lado de su hermano.

Esperar 676 días por un hogar

Matt se unió a Kenai, su "hermano" canino, quien fue adoptado hace más de un año.
Matt se unió a Kenai, su "hermano" canino, quien fue adoptado hace más de un año.

Con una publicación en Facebook, voluntarios del albergue de la LCHS, compartieron la historia de adopción de Matt durante el día 676 de su estadía, mismo que fue catalogado como “normal”; señalaron también que debido a que llevaba ya mucho tiempo viviendo dentro de la perrera, se había acostumbrado a su rutina y a ver a las mismas personas de siempre, pero se encontraba en buen estado de salud y cómodo.

La costumbre fue interrumpida el 17 de marzo luego de que “sus voluntarios favoritos” entraron “uno por uno”, dentro de su perrera con lágrimas en los ojos y comenzaron a despedirse de él, lo abrazaron, aunque no era una de las cosas preferidas de Matt, le arrojaron decenas de golosinas y lo saludaran con la mano.

Al poco tiempo, más personal del refugio entró a la “casa” de Matt también para despedirse, a manera de broma, los voluntarios de la LCHS comentaron que el perro debió pensar que era algo extraño, pues “si todos se iba, ¿quién le daría de comer”. A la reunión improvisada se unió su “padre” adoptivo, quien llegó corriendo para decirle adiós.

Poco a poco, un plan comenzó a tomar forma, pues “un hombre misterioso”, quien se apareció en el refugio a principios de aquella semana, llevó a Kenai, su hermano, para que se reuniera con él.

“Se lo pasó genial retozando en el jardín con su hermano, uno de los 14 huskys con los que llegó al refugio en 2022. Kenai fue adoptado hace más de un año y Matt no creía que lo volvería a ver”, escribieron los voluntarios en la publicación.

Por mucho que se la pasara bien, los trabajadores señalaron que de seguro Matt se debió sentir triste por saber que la reunión pronto llegaría a su fin. “Pero entonces las cosas se pusieron realmente raras”.

El giro en el destino de Matt

Sus cuidadores lo amaban muchísimo, pero estaban seguros de que estaría mejor en un hogar permanente. (Facebook/Lewis and Clark Humane Society)
Sus cuidadores lo amaban muchísimo, pero estaban seguros de que estaría mejor en un hogar permanente. (Facebook/Lewis and Clark Humane Society)

Las cuidadoras le mostraron al perro su nueva carpeta, la cual estaba llena de información sobre él. El recopilado de documentos fue nombrado por los voluntarios como “Matt Facts”, ya que contenía demasiados datos sobre él. Escondido entre sus papeles, venía una forma de adopción firmada, misma que marcó el inicio de su nueva vida.

“Al final resulto que este extraño hombre era el nuevo “papá” de Matt”, celebraron los miembros del refugio. Al finalizar su “cita de juegos”, el perro subió a la camioneta de su nuevo dueño y se dirigió a su hogar en compañía de Kenai.

“Después de casi 2 años en LCHS, Matt está feliz y finalmente vive su mejor vida”, concluyeron los voluntarios de la organización antes de agradecer a sus seguidores por su apoyo.

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