¿Cómo sucedió el accidente con el “gato tóxico” que tiene en alerta a Japón?

El gato pudo sobrevivir a la primera exposición con el cromo hexavalente, no obstante, especialistas dudan que pueda seguir con vida debido a sus hábitos de limpieza

Un gato se convirtió en un peligro para una ciudad japonesa tras caer a un contenedor de cromo hexavalente. (Nomura plating/AFP)

La mañana del lunes 11 de marzo, un trabajador de la Nomura Plating Factory, una planta de revestimientos metálicos ubicada en la ciudad de Fukuyama, en la prefectura de Hiroshima, Japón, notó un curioso rastro de huellas de gato color marrón amarillento cuyo inicio llevaba hasta un contenedor de químicos tóxicos.

La sustancia se trata de cromo hexavalente que, de acuerdo con el Centers for Disease Control and Prevention (CDC) se refiere a un gran grupo de sustancias químicas, todas consideradas como “carcinógenos ocupacionales” que cuentan con diferentes usos y que pueden provocar distintos problemas de salud al causar daños en los ojos, piel y sistema respiratorio.

Las autoridades de la ciudad de Fukuyama alertaron a sus habitantes sobre el felino y los exhortaron a permanecer lejos de él en caso de encontrarlo, aunque hasta el momento desconocen si sigue con vida.

¿Cómo cayó el gato al tanque?

Un gato tiene en alerta a una ciudad de Japón después de caer a un tanque con químicos tóxicos. (Captura de pantalla/Nomura Plating/AFP)

Según reporta el medio local Asahi Shimbun Digital, cerca de las 7:00 horas del 11 de marzo, un trabajador arribó a su turno dentro de la fabrica, cuando se percató del rastro de huellas similares a las de un gato que conducían a uno de los contenedores.

Consternado, revisó las cámaras de seguridad y notó a un gato salir de la fábrica alrededor de las 21:30 horas del día anterior. El tanque al que cayó mide 2 metros de largo, 2.2 de ancho y 3.4 de alto y se encontraba al 70% de su capacidad con solución de revestimiento conocida como cromo hexavalente.

En la abertura del tanque los trabajadores habían colocado una tela, sin embargo, se dieron cuenta de que estaba volcada.

De acuerdo con el medio, la División de Conservación Ambiental de la ciudad declaró que el gato podría estar muerto, sin embargo, hizo un llamado a los habitantes a no tocar ni acercarse en caso de encontrar a un felino “que parece anormal” y contactar de inmediato con las autoridades.

De acuerdo con CNN, los esfuerzos por encontrar al gato en los alrededores de la fábrica no han dado frutos.

Linda Schenk, investigadora especializada en evaluación de riesgos químicos en el Instituto Karolinska de Suecia declaró que es muy poco probable que el animal sobreviva mucho tiempo después de entrar en contacto con la sustancia.

Detalla que a pesar de que el pelaje protegiera su piel de quemaduras graves inmediatas, los gatos se limpian lamiéndose, lo que provoca que “se lleven la solución corrosiva a la boca”. “Mi conjetura es que, lamentablemente, está muerto o fallecerá en breve debido a las quemaduras químicas”, lamentó.

“El incidente nos hizo comprender la necesidad de tomar medidas para evitar que animales pequeños como los gatos se cuelen en la fábrica. Es algo que nunca antes habíamos previsto”, señaló un representante anónimo de la empresa a la agencia de noticias Agence France-Presse (AFP).

El problema con el cromo hexavalente

Las huellas que dejó el gato después de caer en un tanque con cromo hexavalente. (Handout/Nomura Plating/AFP)

El cromo hexavalente es un elemento altamente tóxico y que es conocido por ser la fuente del problema de contaminación en Hinkley, California ocurrido entre los años 1952 y 1966, cuando una empresa vertió cerca de 1.400 millones de litros de aguas residuales contaminadas con esta sustancia en estanques alrededor de la ciudad.

El incidente inspiró a la película biográfica Erin Brockovich, del año 2000 y protagonizada por Julia Roberts, que retrata la vida de la asistente legal que inició una investigación sobre los impactos de la contaminación en la salud y que, en palabras de la activista, según el medio británico The Guardian, “es cierta y un 98% exacta”.