Sherlock, el zorro que perdió su cola pero ganó una vida nueva

Sherlock es un zorro que fue rescatado de una granja de pieles en la que iba a ser sacrificado, sin embargo, el ataque de uno de los animales con el que compartía habitación le salvó la vida, pues le cortó la cola. La administración de la granja decidió deshacerse de él, puesto que “ya no les servía”.

El zorro fue rescatado por la organización sin fines de lucro 101 Paws and Claws, con sede en Florida, Estados Unidos y posteriormente encontró una familia que le abrió las puertas de su casa para siempre. “Sherlock fue abandonado por la granja de pieles debido a que su cola fue devorada por su mamá, aunque esto suene horrible finalmente le salvó la vida”, explicó la gerencia de la organización en una publicación.

El animal llevó su proceso de recuperación dentro de las instalaciones del refugio y fue bien recibido por los otros ejemplares de su especie que están resguardados en el lugar.

La administración de 101 Paws and Claws explicó que el zorro demostró tener una personalidad cariñosa desde su llegada al refugio. Sherlock necesitó de diferentes cuidados, puesto que la herida de su cola no fue atendida por la granja de pieles.

Los rescatistas lo llevaron a una clínica veterinaria donde fue atendido y le ayudaron a cerrar la herida lo más rápido posible, pues el objetivo principal era que la cola sanara para evitar infecciones potenciales o parásitos. El refugio buscó una adoptante desde su llegada y Alicia Lute donó para que el ejemplar recibiera su tratamiento.

La herida de Sherlock sanó rápidamente y una vez que se recuperó de sus heridos su personalidad comenzó a brillar como su pelaje. Lute lo adoptó y se lo llevó posteriormente a su casa, donde fue domesticado, puesto que por su condición ya no podía regresar a la naturaleza.

El animal vive dentro de un hogar en Florida y en los clips que publica la organización 101 Paws and Claws se puede ver que disfruta su vida dentro de la casa, pues pasó de ser un zorro con miedo a estar lleno de felicidad que le gusta brincar entre los muebles de su hogar.

Alicia Lute comentó en entrevista para el canal YouTube, Cuddle Buddies, que a Sherlock le gusta recibir masajes en sus patas y se comporta como un bebé. “Lo encontramos solo, su mamá se había comido su cola y los trabajadores de la granja consideraron que ya no era un producto potencial”, explicó la dueña del zorro.

Los dueños explicaron que Sherlock se puso triste cuando creció porque estaba solo y prácticamente la única compañía que tenía, además de ellos, eran su pelota de juguete. Lute decidió sumar a alguien más a la familia y adoptó a Gwen, una gata de pelaje negro que conquistó el corazón del cánido.

El zorro convive todos los días con la gata y los dos tienen diferentes aventuras todos los días. A Sherlock le gusta brincar y perseguir a su “amiga”. “Él y Gwen se aman el uno al otro, no pesa en ningún sentido que sea de diferente especie, lograron hacer una especie de ‘match’”, concluyó Alicia Lute.