Tirada como si fuera basura: la conmovedora historia del rescate de Trash Panda

La noche del 5 de noviembre, Small and Furry Rescue (SFR), recibió un “urgente email” de una persona que había encontrado una pequeña hurona dentro de una bolsa de supermercado. La bolsa estaba firmemente atada a un contenedor de basura ubicado en las calles de Nueva York.

La historia del rescate de la diminuta mamífera se dio a conocer por la SFR a través de una publicación compartida en su cuenta oficial de Instagram. La organización informa que quien encontró al mustélido tenía miedo de denunciar, pues es ilegal poseer hurones en la gran manzana.

Con decepción, el refugio declara que probablemente nunca se sepa quién abandonó de tal forma al “inocente animal” e hizo un llamado a “presionar para que se establezcan restricciones sobre quién puede vender estos animales” e informó que ya se encontraban trabajando para transportar al hurón a las instalaciones del refugio en Nueva Jersey, donde un veterinario le hará los chequeos médicos pertinentes.

El SFR declaró que, siempre y cuando no sea necesario retenerlo como evidencia porque reportaron el abandono del mustélido a las autoridades de control animal de la ciudad de Nueva York, le buscarán un nuevo hogar apenas un veterinario lo autorice.

Luego de la publicación inicial sobre la historia del pequeño mamífero, el refugio subió la primera actualización. En el post hicieron público que la hurona, ahora nombrada Trash Panda, había sido llevada al veterinario, ahí, determinaron que tenía entre 6 y 8 meses, diagnosticaron que estaba deshidratada, y tuvieron que “darle algunos líquidos por debajo de la piel”, además, se le realizaron análisis de sangre y pruebas de parasitología para descartar alguna probable infestación.

Algo que preocupó a los expertos médicos era la frecuencia cardíaca, que superaba los 300 latidos por minuto, que de acuerdo con el refugio, es un pulso demasiado rápido para un hurón. Ante la presencia de alguna enfermedad del corazón, el veterinario le realizó un “breve examen” y llegó a la conclusión de que Trash Panda estaba en “algún tipo de shock” ocasionado por el tiempo indefinido que permaneció dentro de la bolsa, sumado a la falta de alimento y agua.

El post revela que el análisis de sangre inicial indicaba anemia y niveles bajos de plaquetas, por lo que un patólogo debía evaluar su muestra más a fondo para, “con suerte”, obtener un diagnóstico. Pero a pesar de las malas noticias y las circunstancias en las que fue encontrado, el mustélido estaba de buen humor.

Tras un par de días sin actualizaciones, la SFR compartió una nueva publicación sobre Trash Panda, en donde informaron que la “valiente chica” muestra pequeñas mejoras todos los días y que pasó de dormir la mayor parte del día a empezar a escalar y explorar su recinto. En la fotografía adjunta a la publicación, se ve a la hurona gozar de un mejor estado de salud y de tener un semblante mucho más feliz.

La organización remató el post declarando que, con suerte, “el adorable bebé hurón” estará listo para encontrar un hogar definitivo dentro del próximo mes, y motivó a los seguidores de la historia de Trash Panda a enviar un mensaje si es que alguien estaba interesado en adoptar a la tierna hurona Marshall.

De acuerdo con el sitio web de la organización, el SFR nació en 2021 con la finalidad de ayudar a los pequeños animales de compañía exóticos a encontrar un hogar permanente.

La organización funciona a través de un “pequeño grupo” compuesto por casas de acogida. La SFR admite pequeños animales de compañía como conejos, ratas, cobayas, hámsteres, hurones, chinchillas y petauros del azúcar.

A la cuenta de Instagram se suben las fotografías de los distintos, y pequeños, animales rescatados por la organización, entre las publicaciones es común ver una gran cantidad de hámsteres, conejos, ratas y ratones que gozan de una segunda oportunidad gracias a las atenciones de quienes hacen posible el funcionamiento de la asociación benéfica.