Con el objetivo de luchar contra la extinción de especies nativas en Australia, el gobierno y los grupos conservacionistas redoblaron sus esfuerzos para implementar medidas que ayuden a contener a los gatos salvajes, pues se estima que estos animales matan a 323 millones especímenes endémicos cada año.
Tanya Plibersek, ministra de Medio Ambiente, explicó en una conferencia de prensa que si bien los felinos salvajes representaban la principal amenaza para la fauna local, los félidos domésticos también deben ser manejados de forma adecuada para evitar problemas de conservación en algunos animales.
“Estamos declarando la guerra a los gatos salvajes. Y hoy estamos estableciendo nuestro plan de batalla para ganar esa guerra”, mencionó la funcionaria en un comunicado que tiene como objetivo presentar el plan de reducción de ejemplares de felinos del gobierno para proteger a la fauna silvestre.
Qué problema hay con los gatos domésticos
El gobierno australiano también tiene contemplado implementar medidas en contra de los gatos domésticos, las cuales podrían ir desde restringir el número de mascotas por hogar, prohibir que salgan al aire libre e imponer toques de queda por las noches para evitar que ataquen a otros animales.
“Cuando los gatos domesticados viven dentro de nuestras casas, acurrucados al final de nuestras camas, hay motivos para amarlos. Pero los gatos salvajes son todo lo contrario de adorables. Son asesinos despiadados que caminan, acechan”, agregó Plibersek en conferencia de prensa.
De acuerdo con información del periódico The Sydney Morning Herald, la comunidad científica del país dio su visto bueno a las medidas que forman parte del plan de acción para evitar la extinción de las especies nativas; no obstante, los amantes de los félidos se han mostrado preocupados por el plan de acción, pues desconocen cuál va a ser el futuro de sus compañeros peludos.
Sarah Legge, académica de la Universidad Nacional de Australia, explicó en entrevista para el periódico británico The Guardian que en su más reciente investigación descubrió que los felinos domésticos matan hasta 50 veces más animales por kilómetro cuadrado en zonas urbanas que los félidos salvajes.
Los ejemplares que viven en una casa y no están castrados también representan un riesgo para las especies nativos, puesto que existe el peligro latente que contribuyan al número de camadas no deseadas y aumente el número de felinos salvajes.
Hay que dimensionar el problema
Jack Gough, gerente de defensa del Consejo de Especies Invasoras, explicó en entrevista para el mismo medio que la mayoría de los propietarios de mascota creen que su compañero peludo no es parte del problema, sin embargo, la evidencia científica ha mostrado que más del 70 por ciento de felinos domésticos deambulan por las calles del país.
“Por cada lagarto o pájaro muerto que encuentras en tu puerta, otros cuatro ejemplares quedan en el monte”, compartió Gough para dimensionar la problemática.
Según The Sydney Morning Herald de las 29 especies de mamíferos que se han extinguido en el país, los gatos fueron los principales contribuyentes en 20 casos y actualmente hay alrededor de 200 animales que forman parte de la lista de especímenes amenazados.
Las asociaciones a favor del bienestar de los animales consideraron que las medidas tomadas por el gobierno no abordan el problema de forma acertada, pues no contemplan que las poblaciones de felinos callejeros que no están sexados y no hay quien los contenga.